Durante la Guerra Fría hubo bandas que hicieron saltar la alarma, y ahora esta manifestación cultural está sonando de nuevo. El “Leviatán” de Thomas Hobbes vuelve a cobrar sentido en títulos como “World Eater”, el tercer LP del Fuck Buttons Benjamin John Power como Blanck Mass. Hay una ansiedad global, pero también una respuesta noble a los acontecimientos, y este contraste se registra en sus pistas de electrónico caos sonoro frente a momentos de viva luminosidad.
“Acostumbro a buscar la comodidad en los espacios adversos”. Esa intención se puede percibir desde la enardecedora melodía enlatada de “John Doe’s Carnival Of Error” hasta el estallido de violencia antropoide de “Rhesus Negative”, llegando a cúspides de speed metal para luego calibrarse con pistas como “The Rat”, herederas del “Tarot Sport” (2009) de Fuck Buttons, o “Silent Treatment”, que evoluciona de la explosión a la calma.
Grabado en su estudio casero de Edimburgo, presenta algunas de las pistas más remarcables de su carrera: desde el tríptico “Minnesota / Eas Fors / Naked”, donde incluye grabaciones de campo de una cascada o una batería rodando por las escaleras, hasta “Hive Mind”, el mantra recitado a través de un collage digital preciosista que pone un punto final pacificador.
Tendremos que creerle cuando dice que en este álbum motivado por las convulsiones presentes ha escrito sus primeras canciones de amor.