Travis Scott

En el verano en que un macabro true crime se ha convertido en el pasatiempo nacional –un caso que acumula todos los ingredientes para que los carroñeros de la prensa rosa se regocijen– y en que el vodevil berlanguiano de Rubiales y su familia –desencadenado mediante un gesto repugnante y machirulo– ha adquirido rango de asunto de estado y repercusión internacional, parece mentira que también hubiera un resquicio informativo para un videoclip que ha logrado traspasar la malla habitual de nicho para copar noticieros y faldones digitales.

Se trata del trabajo que centra estos párrafos, el cual adquirió una notoriedad fuera de lo común al presentar a la estrella del rap Travis Scott participando en una tradición de la cultura popular y festiva catalana. El clip en realidad está extraído de una película compuesta por distintos fragmentos –algunos con apariencia de videoclip, mientras que la parte final se despliega como un concierto filmado en un anfiteatro– ideada con motivo del lanzamiento de su último LP, “UTOPIA” (2023). “CIRCUS MAXIMUS” (2023) es el título del desmedido trabajo audiovisual –hora y quince minutos sin demasiada continuidad temática– rodado en diecisiete puntos del globo y que ha implicado la colaboración de distintas productoras y el ejercicio de numeroso equipo artístico y técnico, incluyendo talentos de la talla de Harmony Korine, Gaspar Noé, Andrew Dosunmu, Nicolas Winding Refn, Valdimar Jóhannsson y Kahlil Joseph. Una de esas paradas fueron las ciudades de Tarragona y Barcelona, bajo la logística de la productora barcelonesa CANADA.

El rapero presta su músculo en este castell de 4 de 9 amb folre. La primera parte de “SIRENS” se grabó en Ciutat Meridiana para capturar una barriada popular catalana envuelta en la riada de gente que sale de sus hogares para ir a levantar el castillo humano. Un tráfico de individuos revoltoso y nervioso que recuerda a los fabulosos spots de Frank Budgen para PlayStation y Xbox, de cuando la publicidad era un ente creativo respetable. Ya en la segunda parte, rodada en la Tarraco Arena Plaça de Tarragona, la cámara se infiltra en la elaboración de este castell levantado por Els Castellers de Vilafranca con apoyo de Xiquets de Tarragona, Xiquets del Serrallo, Els Nois de la Torre y los Castellers de Mediona. La estrella de Houston no duda en formar parte de este hercúleo levantamiento. El vídeo concluye con una enxaneta saltando hacia arriba y saliendo de esa madriguera con la que arranca el clip.

Queda por saber de dónde proviene el interés de Scott hacia esta tradición catalana, pero queda claro la exposición sin igual de esta tradición obtenida gracias al vídeo que ocupa estas líneas. ∎