Quincy Delight Jones Jr

Que Quincy Jones (Chicago, 1933) es una de las figuras pivotales de los últimos ochenta años de música popular resulta tan evidente que ya iba necesitando un documento en primera persona, al menos en España, ya que esta es una autobiografía, originalmente, publicada hace veinte años.

Leída hoy en día, “Q: Autobiografía de Quincy Jones” (Q: The Autobiography Of Quincy Jones”, 2001; Libros del Kultrum, 2021) emerge no solo como radiografía certera de los méritos obtenidos por el productor más laureado de la historia, sino también por ser un tratado de alta literatura brutalmente confesional.

Desde la primera página, se advierte la presencia de un narrador igual de excepcional con la palabra escrita que con el arreglo jazzístico, como en la descripción de su infancia, esculpida a partir de un devastador fresco dickensiano de lo que era sobrevivir en un gueto afroamericano en plenos años cuarenta.

A sus innegables dotes narrativas, hay que sumar la enriquecedora doble perspectiva aportada por el círculo de amistades, familia y músicos de su entorno, a quienes otorga voz principal en, prácticamente, la mitad de un libro ensamblado en base a un anecdotario monumental; seguramente, el más sorprendente que se haya volcado jamás en una autobiografía musical, como cuando Ray Charles le enseñó a leer braille. Palabras mayores.

De la banda de Count Basie a LL Cool J, en cada escena descrita a lo largo de tan monumental recorrido está condensada la evolución de la música afroamericana: desde los años cuarenta hasta su constitución como germen del pop dominante en la actualidad. Ahí es nada. ∎