Yo La Tengo

Yo La Tengo han ido ascendiendo con rapidez. Ese empujón definitivo que fuera “Fakebook”  (1990), sus directos, más tarde “May I Sing With Me” (1992) demostraron que se habían convertido en uno de los grupos esenciales en el rock contemporáneo. Ahora, “Painful”. “Big Day Coming”  –los teclados que se imponen poderosamente, la guitarra que se revuelve en feedback, una voz tímida– abre el trabajo para demostrar desde el primer instante que si algo ha cambiado es para continuar igual. La pareja/matrimonio Hubley-Kaplan ha vuelto a realizar una obra maestra. “From A Motel  6” esgrime un ritmo más ágil para que Ira Kaplan haga patente hasta dónde puede llegar su guitarra, cómo es capaz de utilizar cualquier registro. Para “Double Dare”  la velocidad ya se ha disparado, como si perteneciese a las sesiones de “May I Sing With Me”.

Lo hipnótico, los medios tiempos endemoniados, el terciopelo, la energía. No han perdido una sola de sus cualidades. “Nowhere Near” es un sueño en la oscuridad llena de caricias; “A Worrying Thing” es pop mínimo; “I Was The Fool Beside You For Too Long”, un ataque de furia controlada; en “Big Day Coming (Reprise)” no hay control posible. En “The Whole Of The Law”, de los Only Ones, cae una lagrimita; en “I Heard You Looking”, cabe dejarse llevar hasta el infinito por una guitarra clarividente.