De La Soul

Cuando en 1989 se lanzó el primer álbum de De La Soul, el fantabuloso y bombástico “3 Feet High And Rising”, se registró el soplo de aire fresco más gozoso que ha tenido lugar en la historia del hip hop. Allí comenzaba la era del rap de la margarita y del hippy hop. Y el colectivo Native Tongues –del que formaban parte A Tribe Called Quest, Jungle Brothers, Monie Love, Queen Latifah o los propios De La Soul– estaba llamado a ser la avanzadilla de una revolución que, desgraciadamente, se marchitó pronto. Frente a la agresividad y violencia de corrientes como el hardcore rap y el gangsta rap, ellos oponían un hip hop groovy, una actitud tranquila y un mensaje pacifista.

Pero vayamos con la secuencia de los hechos. El álbum “Stakes Is High”, que da título también a esta canción, se editó el 2 de julio de 1996, hoy hace justamente 29 años. El 13 de septiembre de ese mismo año muere asesinado 2Pac, y el 9 de marzo del año siguiente cae también acribillado The Notorious B.I.G.. “Stakes Is High” (“las estacas están altas”) no podía ser un título más certero y profético. La atmósfera era turbia y las guerras del rap entre Costa Este y Costa Oeste estaban en su punto álgido. De hecho, este cuarto álbum del gran trío de Long Island es quizá el más oscuro, serio y adusto de su discografía. Pero aun así, no pierden ese flow fresco y brillante, esa desenvoltura sin exhibicionismo que es marca de la casa.

La canción está producida por el gran J Dilla (1974-2006; por entonces todavía Jay Dee), experto en hacer que minimalismo y groove sean conceptos compatibles. Y contiene frases y barras que en el actual mundo polarizado en que vivimos cobran más importancia todavía. Y así, el inolvidable Trugoy the Dove (1968-2023) esparce rimas como estas: “Estoy cansado de zorras meneando sus traseros / cansado de hablar de porros / cansado de gafas Versace / cansado de ‘slang’ / cansado de galas de premios de medio pelo / cansado de nombrar marcas de ropa…”. Todo un ataque al banal brilli-brilli instalado en el seno del movimiento. Y Posdnuos lanza “¿quién va a perder el tiempo gritando a quien odia?”. Un mensaje claro ante la rivalidad y los beefs que asolaban al hip hop. El vídeo del tema también es muy significativo. En lugar de exhibir sus cochazos, sus cadenas, sus mujeres como mercancía, los tres miembros del grupo aparecen en tareas cotidianas, trabajando, en la cocina, en la lavandería o jugando a baloncesto. Retorno a la vida real. Pero aunque en esta formidable canción anunciaban el regreso de los Native Tongues, estos no volvieron... y desde 2016 estamos sin material nuevo de estos geniales apóstoles del groove. Que vuelvan ya. ∎