Estrella de cine... y música.
Estrella de cine... y música.

CUPRA City Garage

ARON no es invisible

El actor, cantante y modelo Arón Piper presentó ayer en CUPRA City Garage algunas de las canciones de lo que será su primer álbum. Ya ha lanzado la primera, “Invisibilidad”, que nos lo presenta en una faceta musical acorde con los tiempos y en constante metamorfosis. Hablamos con ARON tras su show.

ARON se siente agradecido. “Gracias por venir con este calor en esta tarde de verano en la ‘ciudad cemento’”, le dice al micrófono. Ante él, el CUPRA City Garage, un modernísimo espacio multiusos en el madrileño barrio Salamanca, está repleto de veinteañeros que visten con estilo ropas o demasiado anchas o demasiado estrechas, y beben copas de vino blanco. Más de uno habrá venido a ver al actor de “Élite”, Arón Piper, pero la mayoría está ahí porque ha seguido la faceta musical de este joven artista. Quedará claro cuando ARON interprete su mayor éxito, “Nieve”, y toda la sala cante a gritos ese estribillo que empieza con la frase “Te voy a contar dos cosas, mamá…”.

Pero antes, toca presentar nuevo disco. Dice ARON que está muy contento, “muy feliz de haber encontrado mi sonido y de empezar a experimentar por este lado”, nos confiesa en una entrevista posterior. Las canciones que suenan esta tarde en el CUPRA City Garage, la mayoría de ellas inéditas y nunca antes interpretadas en público, suenan a pop y tienen estribillos muy pegadizos en los que ARON juega con su voz desde los tonos más graves para el rap hasta un agudo falsete bastante bonito para algunas de las estrofas. El joven de 27 años, nacido en Berlín pero criado en el norte de España, se aleja del trap, terreno en el que ha estado jugando hasta ahora, para buscar una música más cercana al indie y el rock ochentero (una de las canciones hace una referencia explícita a Nacha Pop: “En el colchón aún queda el olor de la chica de ayer, yo sé que soy un poco rock and roll pero me sienta bien”). Cita a Tame Impala y a Kid Bloom, quien “ha sido una gran referencia para el álbum”.

En un momento del show en CUPRA City Garage.
En un momento del show en CUPRA City Garage.

Acompañado de bajo, guitarra, teclados y batería, ARON presenta un puñado de canciones cuyas letras suenan confesionales y actuales. “Te compré flores porque ya tienes un Rolex”, canta en uno de los estribillos, quizá a alguna de las chicas con las que se le ha visto acaramelado en público en los últimos meses: Dua Lipa o Peggy Gou. “Si el mundo se acaba yo me pillo un pedo”, lamenta resignado en un tema que suena muy generacional. “Yo quiero irme a la montaña, no quiero más contratos”, entona en otra canción con algo de rabia en las palabras. La desgracia del joven que se ha visto atropellado por el éxito y la fama. Pero hoy se siente mucho mejor, más tranquilo. “Estoy en un momento más luminoso, feliz, y de eso habla el álbum”, nos cuenta. “También tengo mis ansiedades y mis cosas, pero estoy mucho mejor que hace unos años, y eso se traduce en la música. Será que me estoy dedicando a lo que me gusta, que el mundo me lo permite. Me pone en una posición de la que no me puedo quejar, y de la que tengo que estar agradecido”.

Lo que le gusta, insiste, es el cine y la música a partes iguales. En los últimos años ha dejado atrás la serie de Netflix que le ha hecho mundialmente famoso y ha participado en las películas “Código Emperador”, “Fatum” y “El correo”, todas junto a Luis Tosar, y protagonizado la serie “El silencio”. En cuanto a su otra carrera, lleva siendo letrista de canciones desde los 15 años, cuando Gracia Querejeta le pilló componiendo un rap en pleno rodaje de “15 años y un día”. La directora decidió confiar en el pequeño actor, y este acabó nominado al Goya a la mejor canción junto a Pablo Salinas y Cecilia Blanco. “Siempre he sido letrista, me gusta mucho escribir en mi casa”, recuerda ARON, “pero desde hace un tiempo escribo mucho en el estudio. Cómo me siento en ese momento preciso es algo que ayuda mucho”. A “vomitar un poco lo que te pasa” le enseñó, asegura, Papi Trujillo, con el que publicó el EP “Desahogo” en 2022. Es solo uno de los muchos artistas con los que ha colaborado, entre los que se encuentran Polimá Westcoast, Miqui Brightside, Jesse Baez o Pablo Chill-E. “Hay mucho talento ahora mismo”, opina cuando le preguntamos por sus coetáneos preferidos, y nombra uno en concreto: “Ralphie Choo, es muy guay lo que está haciendo”.

Buscando su propio territorio.
Buscando su propio territorio.

Seguro sobre el escenario y en las distancias cortas, a pesar de su fama de tímido ante las cámaras televisivas, ARON da la sensación de ser un artista inquieto y ambicioso. Ayuda haber mamado referencias muy variopintas en casa desde pequeño. “Estoy muy agradecido a mis padres, porque tenían una amplia biblioteca de discos, de todos los géneros”. A su madre la recuerda escuchando siempre a Joaquín Sabina, Manu Chao o Silvio Rodríguez. Además, cuenta con ilusión el extraño regalo que su tío hacía siempre en navidad a la familia: mixtapes, CDs caseros con canciones de, por ejemplo, Gnarls Barkley o The Police.

Defiende que la creación es mejor en compañía, y por ello se juntó con el productor Manuel Lara, que ha trabajado con Kali Uchis, Nathy Peluso o Bad Bunny, entre otros. “Le enseñaba una referencia y le decía: ‘Quiero hacer una canción así, quiero transmitir lo que me transmite esta canción’. Empezábamos a crear desde cero. Metíamos una guitarra, un bajo, esto, lo otro…”. Y así salieron canciones como “Invisibilidad”, el primer single, que el público ha coreado de memoria en el concierto. No solo es el primero de los avances (el segundo, “Especial”, llegará este mes), sino que será el primer tema del LP, y además fue el primero que produjo Lara. “Voy a usar mi invisibilidad / Pa’ que no me sientas y a tu lado poder caminar / Pa’ estar a tu lado toda la vida y poderte observar / No quiero que mi presencia te pueda molestar”, canta ARON en una canción que, explica, “habla del desamor, y del deseo de ser invisible como solución cuando un amor es imposible. Para estar siempre a su lado y no molestarla”. El tema estaba escrito sobre una base de trap, recuerda el cantante, pero entonces el productor le propuso otra idea en el estudio, y así es como empezó el nuevo estilo que ARON ha ido encontrando en el disco. “Hacer música con instrumentos desde cero, componer desde cero, es algo precioso, me ha encantado. Me parece algo brutal”.

“Invisibilidad”. Clip dirigido por Aiden Cullen.
Así es como nació un disco que ARON desarrolló de forma independiente y ofreció ya completado a la discográfica Capitol Records. Se le ve satisfecho, y agradecido, con ganas de tocar estas canciones “en salas pequeñas, donde se junta la energía muy fuertemente, y ves hasta el último de la fila. Eso es muy bonito y muy potente. También veo la música de este álbum en festivales, al atardecer”. De momento, es muy improbable que ARON se vuelva invisible. ∎

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