Super Mario, las criptomonedas… todo menos la ruptura de Elon Musk y Grimes

Pasemos esa pequeña sección del Haciendo Scroll en la que no se habla de Elon Musk: el resto de internet.

Tras un año de parón productivo por la pandemia, Hollywood ha vuelto al trabajo olvidándose de que un paso en falso puede suponer que Twitter se queje durante una semana entera. El anuncio del casting liderado por Chris Pratt como protagonista de la nueva película de animación de “Super Mario Bros.” (tras la cinta de imagen real de los 90 que Disney se empeña en hacernos olvidar) ha tenido este efecto en la red, ya que el actor ha pasado en pocos años de ser uno de los himbos más queridos de Hollywood gracias a “Parks And Recreation” (2009-2015) a ser una de las mayores historias de traición cuando se descubrió que comulga en Hillsong, iglesia acusada de homofobia.

Pero Twitter tiene odio para dar y regalar. Su otra víctima ha sido el live action de “Cowboy Bebop” (1998), simplemente porque… @hollywood, la gente está harta de remakes y necesitamos que los americanos aprendan a leer subtítulos como el resto del mundo.

Levantando un poco los ojos hacia horizontes internacionales, la película protagonista de esta semana (que en España no se estrena hasta finales de octubre) es “Dear Evan Hansen” (Stephen Chbosky, 2021), el nuevo musical-meme que muchos ya comparan con “Cats” (Tom Hooper, 2019). A pesar de que las críticas se centran en un rango amplio de problemas, los memes están enfocados en que su protagonista es un chico que va al instituto, interpretado por Ben Platt –a todo esto, hijo del productor de la cinta–, que cuenta ya con unos escasamente teen 28 años.

La noticia no ha pillado desprevenido a nadie. China lleva años limitando operaciones del estilo: ya en 2017 bloqueó las transacciones de criptomonedas con el extranjero, y el pasado junio limitó el “mineo” (cosa que la nueva regulación directamente prohíbe). Para entender la magnitud del mercado chino en el mundo crypto y el alivio que esto supone al medio ambiente: en abril de 2020 China era responsable del 75% de las emisiones por bitcoins.

La jaula de Mr. Goxx es un espacio considerado distópico por el gobierno chino. En ella, este hámster alemán gira en su rueda y pasa por tubos aleatorios, desencadenando con ello compraventas de criptomonedas, mientras lo retransmite todo por su canal de Twitch y su Twitter personal. En su canal de YouTube, donde también está activo, ha incluido ahora un vídeo haciendo un tour de su oficina y explicando el mecanismo de la misma. Cuando gira en la rueda, elige inversión. Cuando pasa por un tubo, compra. Cuando pasa por el otro, vende.

Mr. Goxx está viviendo el sueño americano de hacerse rico rápidamente. Sus inversiones han tenido por ahora un rendimiento del 20%, números que superan a Warren Buffett, el S&P 500 y probablemente a la mitad de tuiteros que están dando consejos mientras hacen publicidad a eToro. Sus dueños advierten: más que un buen asesor financiero (que viendo los números, también), Mr. Goxx es un cuento con moraleja sobre invertir todos tus ahorros en criptomonedas.  

La sátira financiera es nueva; el formato no. Mr. Goxx sigue la estela de otros animales tuiteros como Pépito, cuya cuenta, que avisa cada vez que este gato sale o entra de su casa para que todos sus 180.000 seguidores puedan desearle un buen día, es uno de los pocos espacios no-conflictivos de esta red social.

Astro es un recopilador de datos móvil. Pero Astro es también uno de los nuestros. En unos documentos filtrados, uno de sus desarrolladores dice que “Astro es terrible y es casi seguro que se va a tirar por las escaleras si se le presenta la oportunidad”. Same, bestie. No sabemos si es esta una táctica para empatizar con el monstruo programado para vigilarnos y coger nuestros datos, una power-move macabra por parte de Amazon, pero hay días en que todos somos un poco Astro. ∎