La vida fugaz de la canadiense Geneviève Castrée (1981-2016) dejó una rutilante estela de talento sensible, honesto, purificador. Ahora que tanto se habla de salud mental, estaría bien afrontar con mayor valentía los orígenes de ciertos desórdenes causados por progenitores incapaces de ejercer su papel. Una crianza negligente puede ser letal y Castrée –nacida Gosselin– es prueba de ello. “Vulnerable”, publicada originalmente en 2012, llega al mercado español en el momento justo. El abuso psicológico infantil en casa hay que encararlo, por mucho que duela a las víctimas o despierte la incredulidad de quienes han nacido en familias funcionales (ojo, no perfectas: funcionales, que funcionan con normalidad). Castrée dio a luz a su hija en 2015 –estaba casada desde 2004 con Phil Elverum (The Microphones, Mount Eerie)–, año en que le diagnosticaron cáncer de páncreas. Murió, pero su obra sobrevivió.
La historieta arranca con una difícil pregunta expresada en su “miniyo” literal –“Goglu”, su apelativo familiar– que se cuestiona acerca de lo innato y lo adquirido. La culpa y la vergüenza afloran en una secuencia donde las raíces literalmente atrapan al bebé, luego niña, que ya manifiesta, desde la página ocho, la desesperada necesidad de escapar del clan. Porque esta es sobre todo una novela gráfica sobre alienación infantil, relato de una desventura existencial que nace con una cría ni deseada ni bien recibida (Geneviève), reflejando de manera cronológica determinados episodios de su niñez y adolescencia. Se trata de eventos traumáticos según la terminología psicológica que de manera precisa la autora va colocando, cartas boca arriba, como si de un suave pero justo ajuste de cuentas se tratara. También deja sitio a la empatía y la conciencia: su viñeta más terrible la dedica a las víctimas de la Escuela Politécnica de Montreal, donde un terrorista misógino asesinó a catorce estudiantes. Denis Villeneuve inmortalizará la historia en “Polytechnique” (2009), mientras que la pequeña Geneviève, en su momento, leerá tebeos de madrugada para espantar las pesadillas con el asesino de mujeres.