Arthur Russell

Audika Records continúa sacando a la luz grabaciones del archivo de Arthur Russell (1951-1992). Hace un par de años el sello de Steve Knutson nos descubrió el maravilloso “Picture Of Bunny Rabbit” (2023) y ahora desempolva un concierto celebrado el 20 de diciembre de 1985 en la Experimental Intermedia Foundation del Soho neoyorquino, el loft-laboratorio creado por Phill Niblock –uno de los grandes valedores de Russell– para dar cabida a las expresiones del avant-garde que brotaban como setas en el downtown de Manhattan en los sesenta, setenta y ochenta.

Russell actuó numerosas veces en el EI: la performance del 20 de junio de 1984 ya la exhumó Audika en 2020 bajo el título de “Sketches For World Of Echo” –y ahora la recupera, en la edición en doble CD, junto a “Open Vocal Phrases Where Songs Come In And Out”–.

Estas actuaciones le servían a Russell como campo de pruebas para lo que sería “World Of Echo” (1986), su álbum de estudio y el único de “canciones” que publicó en vida (el anterior, “Tower Of Meaning”, de 1983, recogía piezas instrumentales escritas para una adaptación, frustrada, de “Medea” a cargo de Robert Wilson).

La voz de Russell y su chelo –más esporádicas y breves intervenciones de armónica, percusión y efectos– crean un mundo de una magia sobrenatural donde el torrente experimental no impide que las canciones desprendan una descomunal y humana calidez: la música de Russell, de una cautivadora fragilidad, parece llegada desde un planeta remoto donde el avant-garde convive sin colisiones dañinas con esporas de folk arcano, jazz líquido y clasicismo de modelado minimalista.

Piezas de “World Of Echo” como “Tower Of Meaning / Rabbit’s Ear / Home Away From Home” y “All-Boy-All-Girl” florecen aquí en versión cruda pero no menos fascinante, y otras partituras del repertorio interpretadas en el concierto –las finales “Changing Forest” y “Sunlit Water”, por ejemplo– ponen de manifiesto que el de Iowa poseía un estilo absolutamente único en el campo –tan fértil y tan poblado– de los compositores de vanguardia, tan equidistante de las ondas repetitivas de Glass, Riley o Reich como de los campos de batalla ruidistas que tanto proliferaban en el Bajo Manhattan de su época. Genio. ∎