Tras afiliarse –sin necesario trámite burocrático– al comando guitarrero del indie patrio con el vibrante “Todavía no” (2023), La Paloma afronta esa reválida discográfica que, a quien más y quien menos, les ha conllevado un vértigo que no siempre puede aligerarse con el riego creativo volcado. El trío madrileño parece sin embargo haber encontrado cierta estabilidad en su segunda paso discográfica.
Puede que incluso tengan la suerte a su lado, pero lo cierto es que hay un empeño notorio para ir a la búsqueda de esta. Esta vez deciden desplazarse hacia un power pop afectuoso. Las guitarras acaparan el nutriente sonoro, y Juan, Nico y Lucas siguen desgranando sus inquietudes, ansiedades, miedos y pesares en unas letras accesibles, sin tirabuzones ni significados ocultos. Directas como corresponde al latir enérgico que soportan.
Abren con “Intacto”, tema que sirve para calibrar ese ajuste de fuerzas entre la fortaleza sónica y la vulnerabilidad que expresan con los textos. La pegada rítmica de “Si no me muevo” se lanza como organismo fagocitador de Weezer.
Si la letra de “Sale el sol” ahonda en la desorientación y cierto hastío, su acompañamiento musical parece dirigirse hacia lo opuesto; sonido compacto y bien orientado.
Por su parte, “Mi hueco” evoca a arañazos, Converse deshilachadas y duchas de sudor en el centro de la pista. Una acelerada de cilindrada antes de saltar a la segunda mitad del recorrido.
Rebajan ánimo con la acústica “Las cosas que me gustan”. Siguen con su (auto)terapia en “Buen intento”. Practican justo lo contrario de lo que elude su título en “Un poco más lento”, su aproximación al hardcore, con los tempos de batería más acelerados, pero sin subir el decibelio vocal. Se despiden con la certera “En mucho tiempo”.
Su recorrido se antoja escaso. Esos once temas se resuelven en 31 minutos más propios de un EP extendido. Pero es la brevedad de los minutajes de las canciones, y la frescura y accesibilidad de su propuesta y letras, lo que convierte a La Paloma en uno de los valores del indie guitarrero español a los que acudir. Sin llegar al sabor duradero que dejan las canciones del debut, aquí queda otro golpe de suerte.∎