Joe Pernice personifica la polifacética naturaleza del genio creativo contemporáneo. Es un escritor de canciones antes que de novelas y también un productor consumado. Hoy no vamos a enumerar su extensa lista de colaboraciones anteriores, ya que no terminaríamos nunca. Lo que es indudable es que sus trabajos con Pernice Brothers, Scud Mountain Boys, Chappaquiddick Skyline o en solitario a su propio nombre le han asegurado un lugar en la eternidad artística. Su estilo, impregnado de una sensibilidad melancólica, evoca una atmósfera de oportunidades desaprovechadas, con canciones de indie rock y sensibilidad pop y folk que parecen simples a primera vista, pero que esconden una complejidad subyacente.
Con su destreza característica, Pernice ha plasmado un abanico de emociones en las nuevas canciones de “Who Will You Believe”, el primer álbum de Pernice Brothers en cinco años, pero casi nada si tenemos en cuenta los más de nueve años entre “Goodbye, Killer” (2010) y “Spread The Feeling” (2019). Para adentrarse en la esencia de esta obra, resulta necesario dirigirse hacia la canción que la concluye, “The Purple Rain”, donde un coro le infunde una condición casi sagrada, erigiéndola como cálido homenaje a los seres queridos que ya no están. Trata sobre su primo, Joe Harvard, fundador de los legendarios Fort Apache Studios de Boston, quien murió de cáncer en 2019. En septiembre de ese año dos grandes amigos, Gary Stewart –exdirector de A&R en Rhino Records– y David Berman –líder de Silver Jews y alma de Purple Mountains–, también se quitaron la vida. “Pasó un tiempo antes de que tuviera ganas de intentar escribir alguna canción, y cuando llegó el momento, todavía me sentía triste”, expresó el artista.
En este álbum, el primero del grupo con sello New West de Nashville después de casi 25 años de autoedición con Ashmont Records, no todo es pesimismo o duelo. Casi cada canción de desesperación se ve atenuada con algo de esperanza y seguro que la banda que lo acompaña en la grabación –su hermano Bob Pernice, Patrick Berkery, Laura Stein, Liam Jaeger, Michael McKenzie y Joshua Karp, entre otros– ha tenido algo que ver. Por ejemplo en “Hey, Guitar”, que se siente como un himno power pop atrapado en la séptima pista, una de las piezas más vibrantes del álbum con un tributo sincero a la constante compañía de un instrumento que vive exhausto. Es la antesala de la agradable “A Song For Sir Robert Helpmann”, un tema totalmente instrumental con los coros de Choir! Choir! Choir!
“December In Her Eyes” representa un giro inesperado en el repertorio de Pernice, fusionando el sonido del soul de Filadelfia con toques de Carpenters o Bread. También hay que recalcar el dúo fantástico con Neko Case en “I Don't Need That Anymore”, una canción que regresa a sonidos más suaves de guitarra acústica y pandereta, con quien realiza un tema cristalino y profundamente bonito. Un pequeño llamamiento desde aquí para prestar atención a la pista “Goldmie” , que, en un tono más bajo y tranquilo, habla sobre una relación que ha sido profundamente herida pero donde todavía hay un deseo de reconciliación. Del amor hacia un mundo mejor merece nuestro reconocimiento también el tema de apertura, “Who Will You Believe”.
Al más puro estilo Weezer, con sus letras irónicas o humorísticas, aparecen unas guitarras y voces más rítmicas en “Look Alive”, que ofrecen instrucciones a un agente funerario sobre cómo presentar, de la mejor manera, al sujeto fallecido de la canción ante un público afligido, entremezclando frases como “If my hair won’t comb”, “You can clip a little off the top” o “But don’t rouge my cheeks”. Esta angustia hacia la muerte, pero con una melodía de lo más dulce, la encontramos también en “How Will We Sleep”, donde Pernice imagina los últimos momentos de un hombre antes de la muerte.
Que se compare a Pernice Brothers con Burt Bacharach o Big Star tiene todo el sentido. Aunque han transcurrido cinco años, la espera ha sido completamente justificada. Este álbum no tiene relleno, está bellamente concebido y ejecutado y podría aparecer en la selección de los mejores álbumes en este segundo trimestre del año. ∎