Tarta Relena

A Tarta Relena corremos el riesgo de explicarlas demasiado. Ponemos tanto esfuerzo en describir los idiomas en los que cantan, el tiempo y el lugar al que pertenece su música (quizá los tiempos y los lugares, en plural) y las tradiciones a las que apelan, que estamos olvidando que al intentar desvelar su misterio quizá estropeemos, precisamente, ese enigma.

Estar metido dentro del laberinto vocal de sus dos EPs, “Ora Pro Nobis” (2019) e “Intercede Pro Nobis” (2020; mejor EP del año según Rockdelux), ya era per se, sin entender nada y sobre todo sin intentar entender nada, una experiencia magnética. Su folk sacro desde el otro lado del espejo nos imantaba sencillamente por la belleza de su sortilegio. Como un conjuro ancestral que no se sabe muy bien qué o a quién invoca. Como un canto de sibila hermosamente encriptado que profetiza un futuro que nadie imagina.

Bien, pues ese futuro ha llegado ahora en “Pack Pro Nobis” y las sibilas Marta Torrella y Helena Ros ya no solo cantan, sino que también bailan. Este doble vinilo de 12” de diseño sinestésico (obra de Clàudia Torrents y Pol Pérez), recopila los dos EPs ya conocidos en un disco, más otro álbum de remezclas de algunas de sus canciones a cargo de John Talabot, Ex Continent, Shelly, Mans O y Garru.

Esta metamorfosis tecnificada revela que Tarta Relena son algo así como las guardianas del umbral a otro plano de realidad. Porque ya no es tanto lo que estos productores de Barcelona aportan a la propuesta del dúo, sino lo que los jeroglíficos armónicos de Marta y Helena añaden a la electrónica de cada uno de estos artistas. Los elevan a todos con texturas otherworldly.

Se podría argumentar que la experimentación corta y pega de Ex Continent en “Morenika”, la repetición maquinal de Mans O en “Infans qui nascitur”, el tejido orgánico de Shelly en “Christos”, los crescendos entrecortados de Garru en “Tota pulchra” o John Talabot infectando de acid, primero, y de dub, después, “Infans qui nascitur” es más enriquecedora para las propuestas individuales de todos ellos que para la de Tarta Relena. Pero eso sería, de nuevo, intentar explicarlas demasiado. Digamos que estos remixes certifican que todos los proyectos que incluyen las voces de Marta y Helena, como bien saben también Maria Arnal y Marcel Bagés, pasan a sonar directamente en más de una dimensión. ∎