Cuando Tunde Adebimpe parecía casi retirado de la música y más centrado en solidificar su carrera como actor –hace poco lo vimos en “Twisters” (Lee Isaac Chung, 2024) o la serie “Star Wars. Tripulación perdida” (Christopher Ford y Jon Watts, 2024-2025)–, decidió sorprender por la escuadra y no solo volver a dar conciertos con TV On The Radio, cinco años después, sino anunciar un primer disco en solitario, “Thee Black Boltz”, compuesto al parecer por verdadera necesidad vital.
Como tantos de nosotros, Adebimpe tiene problemas para aceptar la sinrazón y el ruido del autoritarismo excluyente y violento que empiezan a (tratar de) dominar el mundo. Pero no se trataba solo de procesar la decadencia moral global, sino también, a un nivel más íntimo, la súbita pérdida de su hermana pequeña. Por suerte, no iba a estar realmente solo en el trance, sino acompañado en la producción por Wilder Zoby (viejo colaborador de El-P y Run The Jewels), con quien había compuesto la banda sonora de la serie animada educativa “City Island” (Aaron Augenblick, 2022-).
Tras una críptica intro, el primer verdadero tema en sonar es “Magnetic”, single trotón con algo de “Wolf Like Me” y, por tanto, pequeña pista falsa. Porque quien espere un disco en la onda de TV On The Radio, con su sonido generalmente sulfuroso, igual se lleva una decepción. Esto es (aún) más ecléctico, poliédrico, arty desde muchos ángulos. Sin sonar parecido ni tener esas alturas compositivas, a veces puede recordar a los discos de Peter Gabriel de los ochenta, en los que cada canción era un viaje en sí mismo.
“Ate The Moon” sería un poco el “Sledgehammer” de todo esto: una canción juguetona, en clave de funk-rock sintético y psicodélico, atiborrada de elementos y detalles, contagiosos coros infantiles incluidos. Más glam suena “Pinstack”, sobre vivir en un mundo que es puro caos: “Distorsionados / sí, así es como vivimos todos / empujados una y otra vez / hasta que estamos completamente jodidos”. Ambas son efectivas, pero la verdadera perla es la posterior “Drop”, minimalista y redonda y con un uso ejemplar del beatboxing. Más versos sobre desorientación: “Y mi vida es solo un punto / En una línea temporal / Y mi alma / Se está desvaneciendo esta noche”.
Aunque le sobrarían los motivos, Adebimpe ha decidido no tirar de rabia y quedarse mejor con la ternura.“ILY” son las siglas de, así es, “I Love You”, palabras dirigidas a su fallecida hermana Jumoke; palabras que, según confesó recientemente a la ‘NPR’, dice a todos sus amigos cada vez que se despide de ellos, aunque pueda resultar “incómodo”. Ni siquiera en una canción de ruptura como “The Most”, con sample del clásico dancehall “Under Me Sleng Teng”, se deja tentar por el reproche: “No puedo malgastar mi precioso tiempo / odiándote, cariño / nos deslizamos / a través de fases, espacio y tiempo / todavía te quiero, cariño”. En mitad de esta nueva era oscura, el artista prefiere aferrarse a su humanidad y confiar en que otros lo hagan, quizá inspirados por su música. ∎