El año que viene se cumplirá un cuarto de siglo de la primera emisión de Radio Gladys Palmera, estación herciana especializada en músicas latinas fundada por la polifacética periodista Alejandra Fierro Eleta aka Gladys Palmera. Desde aquella lejana irrupción en la FM barcelonesa, compartiendo punto en el dial con la emblemática Radio PICA, el proteico proyecto de la también coleccionista y mecenas de origen madrileño no ha dejado de transformarse y expandirse, como demuestra este nuevo asiento en su registro bibliográfico, el segundo tras “Cha-Cha-Chá. Un baile y una época en Colección Gladys Palmera” (2020).
Esa especialización en los géneros de raigambre latina –principal seña de identidad de la marca– no ha impedido que su labor se desarrolle con espíritu panorámico e integrador. Pasado, presente, futuro. Tango, bolero, samba. Modulación de frecuencia, pódcast, playlist. Cumbia villera, funk carioca, folktrónica latinoamericana. Y la sucesiva ampliación de su programa de actividades –una monumental colección de incunables fonográficos, acciones educativas en el Caribe Panameño, la incipiente colección de libros que acoge este volumen– confirma una vocación divulgativa y archivística poco común por estos lares.
Todos estos rasgos de carácter permean en las 230 páginas de “Música con nombre propio. Crónicas y reportajes en Gladys Palmera. Antología de textos” (2022), recopilación de textos publicados previamente en su página web –aderezados con listas de reproducción ilustrativas de cada pieza vía QR– que trasciende la mera cartografía de pasiones particulares para sugerir aproximaciones a estilos, artistas y escenas muy diversos.
Por el tomo desfilan Joe Henry –en una recomendable entrevista de ÁLEX GARCÍA AMAT– y Hugo Fattoruso: sin pelos en la lengua frente a la grabadora de CHRISTIAN ALLIANA. Paseamos por las villas bonaerenses –de la mano de GABRIEL PLAZA– para descubrir cómo cuajó allí el rap, pero también por el viejo Harlem para que INÉS MOSTALAC GUIRAL nos cuente de qué manera el barrio se convirtió en núcleo irradiador para la mejor música afroamericana. Conocemos un poco mejor a las pioneras del tango gracias a un artículo con abundantes hilos de los que tirar cortesía de ALAN QUEIPO BONET, mientras ROSA MARQUETTI nos presenta a Emiliano Salvador, una de las figuras fundamentales en el sonido que caracterizó a la Nueva Trova. Viajamos a Medellín para que JOSÉ FAJARDO nos explique el impacto del punk entre las clases populares de la ciudad durante los ochenta, y desde allí cruzamos el Caribe para recalar en el Miami de los noventa con JUDY CANTOR-NAVAS, quien profundiza en la compleja gestación de la a posteriori exitosa escena cubana de la ciudad.
Así hasta completar la treintena de epígrafes que conforman el apetecible índice de este libro, en el que también hay espacio para evaluar el influjo de Elis Regina, valorar el encaje contemporáneo de un instrumento como el cuatro venezolano o acercarse a hitmakers del pasado como Luis Alfonzo Larrain. Mucho de lo que aprender aquí, sin duda, y también muchas pistas con las que diversificar nuestras escuchas. ∎