Media hora de atropello rítmico, de ansiedad servida a latigazos y desencanto furioso. Los cien metros lisos del punk sintético. Suicide
a feira. Un teclado MicroKorg, una caja de ritmos, un par de sintetizadores… Y a volar.
“Fumando espero a que as cousas que me gustan duren máis tempo”,
canta Nuno Pico en
“Fumando espero”. Pero no. El segundo disco del lucense bajo el nombre de
Grande Amore dura un suspiro y pasa como un relámpago. Vibrante y veloz. Un concentrado de energía oscura y diez canciones que son como abrupta erupción de electrónica tóxica e infecciosa. Mejor así.
“Do meu corpo van nacer outros corpos”, brama Nuno mientras lo que nace de su cuerpo son aplastantes rodillos industriales y minimalistas sarpullidos tecno-punk. ¿Lo obvio? Sleaford Mods y Ramones. The Fall y Golpes Bajos. The Suicide Of The Western Culture sin refinar. La Élite sin litrona. Y, sobre todo, un notable avance respecto a
“Grande Amore”, debut de 2021 y deliciosa chatarrería de protopunk a lo Stooges, rock de los cincuenta, electrónica destartalada y voz como de picahielos recién afilado.
“Todo e pouco ou todo é demasiado”, canta ahora el gallego al tiempo que aplasta y compacta todo aquello. ¿El resultado? Un monolito de electro-punk enfurruñado pero tremendamente disfrutable. Un salivazo detrás de otro que, con la ayuda “filosófica” de Carlangas en la producción, llegan más lejos y multiplican su onda expansiva. Porque ahí están, servidos entre mazazos de ritmo crudo y sintetizadores encajados a martillazos, la precariedad, el desencanto vital, la rabia por un presente con menos futuro que el minidisc…
“Queren que faiga cancións máis bonitas / Cuando eu moitos días / o único que quero é / Ah, pelea, ah, ah, pelea”, resume, desafiante, en la espléndida
“Pelea”.
Una (otra) ingeniosa vuelta de tuerca a la dialéctica del “no future”; música popular con el machete entre los dientes y la barricada en el bolsillo. Energía atómica y una nube de humor airado. La apisonadora de
“Onde ela men quer levar” y el realismo sucio de
“Necesito estar borracho”. ¿Se acuerdan de A.R.E Weapons? Pues esto es mucho mejor. Porque es de verdad.
“Eu non son deste mundo”, que canta en
“Ben sabe Dios que o intentei”. ∎