Entre los viejos fans todavía hay energía para amigables –no es fútbol, política o religión, aunque esto último casi lo fue– discusiones sobre cuál es el mejor álbum de
New Order hasta
“Technique” (1989). Mi percepción ha variado con el tiempo aunque suele triunfar
“Power, Corruption And Lies” (1983).
“Low-Life” (1985) supuso un paso más en la evolución del sonido de la banda, equidistante entre el post-punk electrónico de su anterior fase y la música de baile para melancólicos de la siguiente.
El tercer disco del cuarteto de Mánchester destaca por la frescura de su producción –atrás quedaban definitivamente las atmósferas enrarecidas con origen en Martin Hannett–, por el perfecto equilibrio entre guitarras eléctricas, sintetizadores y el bajo de Peter Hook en su etapa más definitoria y brillante, o un Bernard Sumner que se destapaba como peculiar cantante expuesto a la luz solar y tímido letrista narrativo: siempre se menciona como ejemplo la fantasmal
“Love Vigilantes” con su mítica melódica. En realidad, expuestos quedaron todos los componentes del grupo con las polaroids en
dreyeriano blanco y negro que acompañaron la edición original cubierta en papel cebolla que Nuevos Medios respetó en España y que mantiene la actual también para el CD. Es, por cierto, la única portada de un álbum de New Order donde asoman sus rostros –alargados– con el del batería Stephen Morris en una ilógica portada, decisión que demostraba la idiosincrática democracia interna de la banda. También se estrenaban a la hora de incluir los singles en el álbum. La intención era penetrar en el mercado americano.
Pero esta reseña no atiende tanto a “Low-Life” como a su “edición definitiva”, tercera en la serie tras
“Movement” (1981) y el mencionado segundo álbum. Dejando de lado la manida polémica de las ediciones “aniversario”, “deluxe” o “definitivas” asumiendo el sentido de su propósito y público al que van dirigidas –dudo que el mundo fuese mejor sin ellas–, digamos que el valor de este lujoso (y caro) artefacto se encuentra en los extras audiovisuales y en menor medida en sus aspectos accesorios.
En la parte “visual”, encontramos los habituales DVDs con heroicas actuaciones de estos autodidactas de la técnica en directo localizadas en Tokio –ya publicada en VHS con el título de “Pumped Full Of Drugs” en 1985–, Róterdam, Lovaina y Toronto, un “Whistle Test” grabado en The Haçienda, y el mítico “The Perfect Film” registrado por Jonathan Demme en la sala de ensayos de Cheetham Hill, en Mánchester, donde interpretan en vivo
“The Perfect Kiss”. Recuerdo esta como la primera vez que pude ver al grupo con total transparencia –se les aprecia hasta las pestañas–, cortesía a la sazón del legendario programa de TVE ‘Metrópolis’. Misterio de un pasado casi eleusino comparado con la época de la sobreexposición rebosante en la que vivimos.
En el apartado solo “audio”, hemos de decir que llamar “definitiva”, con toda su carga maximalista, a esta edición solo tiene algo de sentido si también se posee la versión “deluxe” de 2008. Decimos esto porque el CD extra no contiene, como viene siendo habitual en esta nueva serie de
box sets de New Order, los singles o maxisingles –en este caso,
“Sub-Culture” y “The Perfect Kiss”–, ni sus caras B –tampoco figuraban al completo en la edición de 2008– u otras pistas de la época. Entre estas últimas sí reaparecen
“Let’s Go” y una maqueta –en la que solo faltaría la voz de Ian Curtis– de
“Skullcrusher”, parte de su aportación a la banda sonora de la película “Salvation!” (Beth B, 1988), aquí en versiones y minutajes diferentes a los ya conocidos.
Ese mismo CD añadido contiene dos cortes sin título –donde
“Untitled 1” suena a “Bizarre Love Triangle”– y tomas instrumentales en fase avanzada de gestación de casi todos los cortes del álbum, si bien comparar estas potentes crisálidas con el producto acabado no deja de sorprender. También destacan la coda sinfónica de 17 minutos de
“Elegia” –ya presente en la vieja “deluxe”–, la versión completa de
“Sooner Than You Think” o la extendida de “Love Vigilantes” sin letra. Un lujo definitivo. ∎