“Mad Men” inauguró una particular fascinación de las series norteamericanas con el siglo XX como laboratorio de pruebas donde se forja nuestro presente. “Masters Of Sex”, “The Knick”, “Vinyl”, “The Deuce”, “Boardwalk Empire”, “Morir de pie”… Con sus diferencias, todas funcionan como
origin story o relato de pioneros sobre un ámbito particular, ya sea la cirugía, la pornografía, el crimen organizado, la
stand-up comedy... Con
“Mindhunter” (Netflix, 2017) nos asomamos a los albores de la criminología aplicada al estudio de los psicópatas, asesinos en serie sin móvil aparente que hacen inútiles los métodos tradicionales del FBI. El foco se posa en dos agentes que, a finales de los setenta, entrevistan a psicópatas convictos para elaborar un perfil que catalogue, explique y ayude a resolver unos crímenes que desafían la lógica y la moral.