Arto Lindsay
ha ido mutando desde sus inicios en DNA, incluyendo después su
vertiente más pop con Ambitious Lovers y todas sus grabaciones
post-bossa nova, aunque sin dejar nunca de lado esas guitarras más
infecciosas, discontinuas y parasitarias que los parásitos de Bong
Joon-ho. Este nuevo trabajo de pura vanguardia,
“Largest Afternoon”,
está
más cerca de sus inicios en el universo de la no wave, pero con todo el
poso adquirido en cuatro décadas de constantes virajes, indagaciones,
explosiones e introspecciones sonoras.
Ahora, la guitarra de Lindsay, igual de guerrillera a la vez que más nihilista, se ha aliado con la batería de
Phil Sudderberg y los saxos de
Ken Vandermark y
Joe McPhee.
El resultado, registrado en un solo día de febrero de 2019
–posiblemente en esa tarde a la que alude el título del disco–, es una
improvisación sin etiquetas, tan lejos y tan cerca del jazz y del rock
abstracto, en formato dúo, trío o cuarteto. Cuerdas, boquillas y parches
en puro trance underground, ese tipo de disidencia musical que resulta
siempre efectiva, en cualquier época y en cualquier lugar. Aunque son
los dos saxofonistas los que mandan, el diálogo entre los cuatro
instrumentistas en el último tema,
“Or Depth Of Field”, es monumental. ∎