Con su pop perfecto magnificado por ecos de Broadway y del Brill Building, su lírica inventiva y su clase irresistible,
Prefab Sprout son y serán leyenda de la música popular de nuestro tiempo, con
“Steve McQueen” (1985) como una de las mejores pruebas de su impronta genial.
Esta reedición remasterizada y expandida del clásico tenía que haber estado lista para 2005, precisamente para celebrar sus veinte años, pero la espera ha merecido, y cómo, la pena. Primero porque “Steve McQueen” (en Estados Unidos su título fue “Two Wheels Good” a causa de conflictos con los herederos legales del actor Steve McQueen) ha sido restaurado digitalmente por Thomas Dolby, su teclista y productor, el responsable en primera instancia de su celebrada osadía sónica. El disco suena espacioso, delicado, matizado, profundo… Mejor que nunca, vamos.
Y después tenemos ese CD adicional que es, en fin, todo un acontecimiento. No hay maquetas, ni caras B ni inéditos ocultos en viejos cajones, ni siquiera los temas extra (o la distinta
“When Love Breaks Down”) que aparecían en la edición yanqui de la obra festejada. Lo que encontramos es una grabación acústica de la práctica totalidad del disco por el
frontman del grupo, el maestro Paddy McAloon: sus primeras noticias desde el insólito disco a solas “I Trawl The Megahertz” (2003). Lejos del tópico del hombre solo ante sus seis cuerdas, McAloon se sirve de voces, guitarras y teclados para reformular ingeniosamente ocho de los once temas originales (atención a la nueva
“Desire As”). No en vano, la peripecia tardó en acabarse tres veces más que “Steve McQueen”. Lo dicho: un acontecimiento. ∎