“West Coast” (2006) fue el único álbum de Studio creado después de muchos años de cocción por dos estudiantes de arte de Gotemburgo llamados Rasmus Hägg y Dan Lissvik, el segundo también productor, vocalista y diseñador gráfico del disco. Su sonido se caracteriza por la falta de encaje en un estilo concreto, aunque incorporara voces y suela asociarse genéricamente a la electrónica de baile. El éxito de crítica cosechado por aquella edición limitada de Information –sello propio del dúo– hizo que el álbum fuera reeditándose sucesivamente hasta 2009 antes de caer en el olvido tras la separación de la pareja en 2011. Gracias a la casa neoyorquina Ghostly International vuelve a la vida –casete, CD y LP con seis cortes digitales añadidos en streaming– este curioso trabajo supuestamente inspirado en la costa oeste de la Suecia más isleña al que gente no tan dispar como Arthur Russell o CAN habrían acogido en su canon.
Ambos chavales ostentan la autoría en los seis cortes titulares –excepto “Origin”, atribuido en exclusiva a Hägg, o también Högg– de esta interesante obra de, llamémosle, “balearic art dance pop”. De hecho, Lissvik canta en tres: además del tema mencionado, “West Side” y “Self Service”. Y sin embargo, “West Coast” vuelve a escaparse, esta vez del pop, para transmitir una desenvuelta libertad de formas que pivota alrededor de los instrumentos tradicionales de una banda de rock. “Origin” hunde precisamente sus cimientos en aquel sonido disco neoyorquino de finales de los años setenta que águilas del groove sin complejos capitaneadas por Andy Weatherall se dedicaron a desenterrar en recopilaciones como “Nine O’Clock Drop” (2000), justo antes de nacer Studio. En ese campo híbrido, entre festivo y experimental, se desenvuelve “West Coast”.
También se rescatan las dos tomas de “West Side” incluidas en un maxisingle homónimo de 2007, seguramente el momento más comercial de Studio. La canción aparece por partida cuádruple al incorporarse otro extra: “West Side Lullabye (CDR Version)”. Aquel mismo año salió a la venta “Yearbook 1”, una variación de “West Coast” editada solo en CD, con portada diferente, un tema añadido –la olvidable “No Comply”, que también fue 12”– y la coletilla “versión original” adherida a los mismos títulos. De allí sale un corte editado de “Self Service” que recuerda a unos Happy Mondays con la guardia baja, mientras que la original del álbum empieza como The Cure. Lo bueno de Studio es su apertura y liquidez, aparente indolencia y capacidad para la sorpresa a medida que ritmos, efectos y melodías surten la mezcla sin resultar de ello un muzak ecléctico infumable. Eso es magia.
Lo más perdurable de la hazaña prácticamente privada de Studio se encuentra en piezas como “Out There”. Sus casi dieciséis minutos describen una odisea de jam bizarro repleta de altos, bajos y mutaciones entre Quando Quango, un dub saltarín o los New Order posteriores a “Blue Monday” con una sección final que cuaja en los Donna Summer y Giorgio Moroder de “I Feel Love”. “Life’s A Beach!” es el otro tour de force de “West Coast”: trece minutos concebidos de forma similar –salvo la “CDR Version”, de tipo más Basic Channel, añadida a la reedición–: una oleada de ritmos mutantes, aperturas luminosas y hedonismo expansivo con sampleado playero perfecto para la ocasión. Pero quien busque calma freestyle o chill out descafeinado se equivoca de cala. Lo de Studio era bastante más tenso.
La exótica “Indo”, con otros diez minutos generosos –también aparece por partida doble junto a una versión más áspera reducida a la mitad–, un poco entre la IDM, Robert Fripp y otras influencias de extrovertida procedencia que hacen de Studio el improbable cruce de caminos que llegaron a ser, al borde del desastre pero siempre cerca del éxtasis, cierra este original “West Coast”, el del sol negro, un álbum mini-maximalista, dentro pero fuera del tiempo, que surgió del frío simétricamente equidistante en veinte años desde el apogeo balear y la reedición actual. Hägg y Lissvik aún tuvieron tiempo de hacer caja como remezcladores hype para gente como Kylie Minogue, Steve Mason (The Beta Band) o Shout Out Louds antes de evaporarse. “Yearbook 2” (2008) recopiló alguno de aquellos cortes. ∎