Álbum

Wilco

The Whole LovedBpm-Anti-Epitaph-[PIAS] Spain, 2011
Basta ya de esa canción sobre el supuesto anquilosamiento y obsesión perfeccionista de Wilco. Primero, porque no hay nada malo en buscar ese ideal de perfección, y porque el dominio de los recursos operativos, siempre acompañado de un buen surtido de ideas, nunca es un lastre, sino un fabuloso compañero de viaje. Y luego, porque el grupo de Chicago demuestra en “The Whole Love” que los lánguidos cantos funerarios que alentaron los dos trabajos anteriores eran precipitados. Esta es una obra a la vez detallista y rocosa; dos en una. Es una muestra de poder en su acepción más integral. Con precisión y melancolía, pero sin dejar de ser en ningún momento un disco de rock.

Rock neoclásico, con raíces y pliegues, que alimenta enormes dinámicas instrumentales calculando los momentos de clímax y distribuyendo los puntos de inflexión con pulso clínico. Tenemos exhibiciones de musculatura como “I Might”, “Dawned On Me” y “Born Alone”, y crepúsculos climáticos como “Black Moon”. Insinuaciones roots en “Capitol City” y un par de temas construidos a otra escala: el que lo abre, “Art Of Almost”, un viaje de riesgo a través del krautrock con desenlace de rock ácido (un The Grateful Dead llevado al límite), y el que lo cierra, “One Sunday Morning”, loop sereno y ensoñador, con base de piano y diálogos latentes con Neil Young. ¿Disco de madurez? Disco de magisterio. ∎

Etiquetas
Compartir

Contenidos relacionados