Brian Eno ha demostrado una gran capacidad para trabajar en solitario y en colaboración. Puede hacer discos él solo, encerrado en el estudio de grabación, considerando la mesa de mezclas como un instrumento más. O puede juntarse con otros (David Byrne, John Cale, Robert Fripp, Roedelius y Moebius, Jah Wobble, James) y concebir discos a medias en modélico equilibrio. Si su trabajo como conceptualizador y productor es destacado, su trayectoria por el territorio fértil del pop, el glam o el rock es tan o más notoria. Responsable de su obra, pero también del sonido, el arreglo o la atmósfera de la de otros. En estas diez canciones resumimos lo más significativo de su inimitable cancionero.