Mariya Takeuchi: su canción “Plastic Love” se hizo viral. Foto: Alan Levenson
Mariya Takeuchi: su canción “Plastic Love” se hizo viral. Foto: Alan Levenson

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El McAitana, la MET Gala y el resurgir del amor de plástico

La base de la nueva pirámide alimenticia: el McAitana

Como las luces de navidad en diciembre, si uno entraba en internet está semana lo único que veía era el menú de McDonald’s de Aitana. La combinación inverosímil de marca + artista pop titánica que no tiene ningún tipo de relación con ella toca de algún modo un sweet spot del sentido del humor del internet nacional. Diseccionado, en el meme se juntan varias fuerzas: a) que internet sigue con la sensación de que el representante de Aitana la mete donde sea, b) que es una cantante que genera una sincera simpatía y c) que Aitana es celíaca y no puede comer nada de lo que patrocina. Las barreras entre el sarcasmo y la genuinidad se difuminan, y McDonald’s tiene una de las campañas más exitosas de su historia en España. Mientras la prensa tradicional se vuelca en lo insano que es el menú, Internet se llena de memes de gente queriendo pedir un McAitana.

El menú de McDonald’s de la celíaca Aitana. <a href="https://twitter.com/honeysvkle/status/1437405847693443081" target="_blank"> Ver tuit </a>
El menú de McDonald’s de la celíaca Aitana. Ver tuit
El de Aitana es un paso más, junto con otros spots muy recientes como Doja Cat cantando “You’re The One I Want” para Pepsi (también viral pero menos “memeable”), hacia la vuelta a la publicidad “dosmilera” y sus colaboraciones sin ningún tipo de sutileza. No solo cuenta el revival del contenido, sino también el del formato. Esta nueva tendencia contrasta frontalmente con los posts de influencers que llevan los últimos diez años haciendo colar anuncios como consejos personales. Parece que encontremos algo de respiro y algo de autenticidad en estos acuerdos millonarios en los que estamos convencidos de que el anunciante no va ni a probar lo que anuncia.

Los memes de la MET Gala

La MET Gala de este año nos ha pillado de sorpresa, ya sea porque normalmente se celebra en mayo, o porque “In America: A Lexicon Of Fashion” era una temática demasiado olvidable viniendo de la gente que introdujo la palabra “camp” en los vocabularios de gente que nunca habíamos leído a Judith Butler. Sea como fuere, aquí están: los memes.

En los últimos años (imagino que antes también era así, pero internet ha dado una nueva accesibilidad al deporte) la MET Gala se ha convertido en una versión extendida de la mejor parte de los Óscar: criticar las alfombras rojas. Todos los famosos imaginables se reúnen en Nueva York para hacer caso omiso a la temática propuesta por Anna Wintour, y para darnos imágenes que recordaremos intensamente durante unos pocos días. Este año encontramos memes destacados del vestido “Tax The Rich” de Alexandria Ocasio-Cortez (que se ha convertido en una pizarra blanca de mensajes hechos por Paint, y también para reflexiones políticas que cuantifican el impacto que puede tener un acto performativo como este), el bebé animatrónico verde de Frank Ocean y la sombra de Kim Kardashian.

Grimes y su espada. <a href="https://twitter.com/villeneuvesque/status/1437560578990612482" target="_blank"> Ver tuit </a>
Grimes y su espada. Ver tuit

La boda del primo de mi amigo

Nicki Minaj no asistió a la MET Gala, pero aprovechó la ocasión para hacer saber a sus fans que aún no ha recibido la vacuna. Desde su cuenta de Twitter contaba que tener la pauta de vacunación completa era un nuevo requisito para asistir al evento, y mientras comentaba que en algún momento se tendrá que vacunar para ir de gira, “si me vacuno, no será por la MET”. La cosa se volvía muy azealiabankesca pocos momentos más tarde, cuando argumentó su postura con un tuit para la historia: “Mi primo en Trinidad no se vacunará porque su amigo se vacunó y se volvió impotente. Sus testículos se hincharon. Su amigo estaba a pocas semanas de casarse, ahora la chica ha cancelado la boda. Así que simplemente reza por ello y siéntete cómodo con tu decisión. Que no te hagan ‘bullying’”. Con más de 100k retuits en menos de 24 horas, estas pelotas capaces de parar una boda se convirtieron en el spin-off oficial de los memes de la gala.

¿Efecto secundario de la vacuna? <a href="https://twitter.com/BrivnJimenez/status/1437536025769742336" target="_blank"> Ver tuit </a>
¿Efecto secundario de la vacuna? Ver tuit
En las respuestas, varios tuiteros apuntaban que la hinchazón de los testículos, más que a un efecto secundario de la vacuna, suele deberse a enfermedades de transmisión sexual. El exposé está servido: ahora toda China sabe que al amigo de tu primo lo dejaron en el altar por ponerle los cuernos a su novia.

La icónica foto de Mariya Takeuchi

No todo el mundo tiene la posición de Nicki Minaj para viralizar cualquiera de sus gestos. El eco de Mariya Takeuchi, artista city pop en los 80, fue confinado por el hecho de ser japonesa en una época menos globalizada que la actual. Su canción “Plastic Love” se hizo viral en YouTube treinta años más tarde, empujada por la obsesión de internet con sonidos como el suyo en el punto más álgido del future funk y del vaporwave. La última subida de la canción (que ha sido borrada unas cuantas veces) ha alcanzado los 43 millones de reproducciones en tan solo un par de años y se ha convertido en un himno del internet más extremely online. Parte de la magia que ha hecho viral el “vídeo” está en la fotografía de Alan Levenson que acompaña a la canción, en la que Takeuchi se gira con su pelo suspendido en el aire, y cuyo copyright ha sido justamente la razón de las diversas desapariciones del tema en la red. Si este párrafo te está sonando a una realidad paralela en la que no estás seguro de participar, estoy convencida de que la has visto sin o con poco contexto.

Esta semana se ha anunciado la reedición del single en vinilo de 12”,  con un guiño a su segunda vida virtual: la portada será la foto estática que le dio fama en internet (que en su momento ilustró otro sencillo de Takeuchi, “Sweetest Love”), y no la espartana cubierta original. Esta foto ha llegado donde los NFTs pretenden llegar, algo que Piqué, sacándose selfies como cromos coleccionables, nunca quiso entender: a hacer posible la justa retribución financiera a artistas cuya viralidad en la red ha causado un desnivel entre su fama online y su cuenta de ahorros. ∎

El eco de Mariya Takeuchi.
El eco de Mariya Takeuchi.
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