Detrás de RAT BOY está Jordan Cardy, quien le canta a casa, a Essex, en el que será su tercer álbum, “SUBURBIA CALLING”, que se publicará el próximo 4 de octubre a través de Hellcat. Canciones suburbanas que definen el momento en el que las ciudades, cada vez más inabarcables y hostiles, están haciendo de sus conurbaciones espacios de huida y creación.
Sabía de quién rodearse Cardy para el cometido de retratar su tierra: de Blur, Depeche Mode o The Prodigy. En “SUBURBIA CALLING” ha contado con Stephen Street, productor de The Smiths en “The Queen Is Dead” (y más adelante en “Strangeways, Here We Come”), de Morrissey en solitario (en “Viva Hate”) o de los Blur que retrataban la vida de sus coetáneos en la gran Londres –lo que RAT BOY busca ahora– en discos como “Leisure” (1991), “Modern Life Is Rubbish” (1993) y “Parklife” (1994).
Con la influencia de Albarn, Coxon, James y Rowntree en sus primerizos y dispersos pasos iniciales, RAT BOY cuaja canciones con un ensamblaje estilístico entre ramalazos indie pop de los primeros noventa, britpop, el punk y los sonidos 2-Tone. “BADMAN” es el más punk de los tres adelantos conocidos hasta la fecha: guitarreo pegadizo y un energético acompañamiento de vientos y teclados para contar la historia de un pequeño gángster local, con los Specials en el punto de mira.
Tanto “BADMAN” como “ONE IN A MILLION” y “SUBURBIA CALLING” –los adelantos previos– son canciones que reflejan la vida cotidiana y las experiencias de la juventud local.
RAT BOY surgió como revelación británica a principios de 2017 con un “SCUM” más skate punk, de grandes coros y muy marcado por la música de Jamie T, al que siguió “INTERNATIONALLY UNKNOWN” (2019), de la mano de Tim Armstrong (Rancid), que supuso un paso adelante y un alejamiento del pop punk adolescente. ∎