Abel Tesfaye, conocido como The Weeknd, publicó el pasado viernes el álbum “Hurry Up Tomorrow” tras tener que postergar su lanzamiento por los devastadores incendios de Los Ángeles. Quitada la lona de la nueva carrocería, el canadiense ha puesto la directa en su promoción. Pasando por el show de Jimmy Kimmel y lanzando hasta dos videoclips: El de “Open Hearts” y esta inclasificable creación para “Red Terror”, con la participación de Eddie Alcazar, un director apegado a la rareza que había trabajado con Flying Lotus en “FUCKKKYOUUU” y que también deja su firma en el vídeo de la actuación en el famoso late night norteamericano.
Al contrario de lo que podría imaginarse, algo que hubiera resultado más fácil y económico, no hay rastro de vídeos reciclados extraídos del metraje de la película que se basa en el álbum y que protagoniza el canadiense bajo las órdenes de Trey Edward Shults –hoy podremos ver el primer tráiler–. La cobertura visual de este “Hurry Up Tomorrow” se basa, por ahora, en propuestas singulares como la que protagoniza estas líneas. Alcazar se sirve del stop motion combinado con VFX para presentar un universo de pesadilla telúrica en que la que un niño se ve violentamente poseído por una explosión rojiza del subsuelo. Mientras su antiguo avatar se destruye, el nuevo se caracteriza por un cuerpo con la boca precintada. A partir de ahí se lanza a una carrera en scroll lateral por un bosque ominoso hasta llegar a una especie de criatura final donde lo gore cobra protagonismo.
Se puede entender este relato como una parábola del Terror Rojo etíope, un período de represión política aterradora que tuvo lugar en el país africano entre 1976 y 1977. Nuevas preocupaciones que el canadiense explota bajo la alucinada carcasa de un Alcazar que se sirve de su experiencia como desarrollador de videojuegos –títulos como “Baldur’s Gate” e incluso “Inside” o “Limbo”, pese a la distancia de estilos, rebotan en la memoria– y que se nutre especialmente del imaginario gore y serie B por el que suele interesarse desde una perspectiva enrarecida y poco dada a la complacencia con el gran público. De ahí que la unión entre The Weeknd y Eddie Alcazar resulte inesperada, pero también gratificante. ∎