A los primeros compases de “Pyramid”, el corte de apertura, pareciera que un telón espacio-temporal se hubiera descorrido para dar paso a una tragedia (griega) de dimensiones cósmicas. ¿Esto es un disco o un ritual iniciático para devotos del spiritual jazz? En todo caso, “Ancient Tribal Hearts” lleva ese tipo de sonido a sus últimas consecuencias. Si bien es cierto que este combo de trece componentes, formado por Lee Boyd Allatson en 2017, empezó realizando versiones de Alice Coltrane, Joe Henderson, Pharaoh Sanders, Mulatu Astatke o Johnny Dyani, su formulación musical ha englobado una amplia paleta de tonalidades donde el afrofuturismo y lo espiritual se dan la mano con sonoridades indias y japonesas, la música del antiguo imperio grecorromano, aromas arábigos e influencias latinoamericanas.
A partir de las composiciones de Allatson e inspirados por tamaño arsenal de embriagadores efluvios, la formación se sumerge en una especie de ritual meditativo donde la improvisación juega un papel fundamental y donde todo destila un aire esotérico, como si Ka Safar, con esta su ópera prima, se hubieran decidido a orquestar la banda sonora jamás escrita de uno de aquellos ritos mistéricos que se daban en determinados santuarios de la antigüedad. En sus actuaciones incluyen bailes e interpretaciones de corte teatral, utilizan atuendos al uso y recitan los crípticos versos de sus letras en clave de spoken word entre fogonazos de iluminación psicodélica.
Todo ello supone una de las mayores sorpresas discográficas de la temporada, con suficientes puntos de contacto con la exuberante escena jazzística británica, pero también con las oportunas líneas de fuga como para considerarlos una rara avis, una formación con integrantes de diversas procedencias que come aparte y que, aun estando afincados en el centro de la geografía inglesa, concretamente en Leicester, son hijos de un mundo globalizado donde no hay normas ni estilos, sino un libre fluir a partir de un caudal sonoro que ya es patrimonio de toda la humanidad.
El recomendable sello cántabro 2 Headed Deer ha sido quien se ha llevado el gato al agua al editar “Ancient Tribal Hearts”. Las primeras 300 copias ya están agotadas, y se hace evidente que la calidad de la obra merece una nueva tirada de mayores dimensiones, aunque lo exiguo de esta primera edición bien pudiera convertirlo en un objeto de culto. También pudiera ser confundido, en caso de ser escuchado por un alienígena en un futuro incierto, por un artefacto sonoro llegado de otro tiempo u otra galaxia. En todo caso podemos asegurar que estamos ante una de las obras musicales más extrañas y bellas de lo que llevamos de año. Sobresaliente. ∎