De “O paraíso” a “What’s Life”, primer y segundo tema del nuevo disco de Lucas Santtana, uno cantado en portugués y el siguiente en inglés, hay todo un abanico de enormes posibilidades dentro de un mismo registro genérico, el de la nueva música popular brasileña. El sonido de la primera canción es más abstracto y la voz de Santtana cabalga, medio oculta y distante, sobre unas bases electroacústicas. El de la segunda es mucho más limpio, tradicional si se quiere, pero con suficientes inflexiones y matices –la combinación de percusiones clásicas y sonoridades electrónicas– para resaltar su tono diferencial. Cantado en inglés, es más bossa nova que el entonado en portugués. Por el contrario, en el tercer corte, “Vamos ficar na Terra”, las raíces se exponen con meridiana claridad, invocando por igual a João Gilberto que a Caetano Veloso. Una canción preciosa mecida por unos vientos que evocan sin duda el lugar de donde viene Santtana, Salvador de Bahía, y una trompeta, en particular, que reverbera como en los mejores tiempos del tropicalismo. Sin pausa alguna, el siguiente tema, “Errae humanum est”, versiona a Jorge Ben estableciendo delicados lazos con la bossa nova cósmica y aérea de este autor. De nuevo los vientos –con el saxofonista galo Laurent Bardainne a la cabeza–, punteando la voz de Santtana o prolongando las melodías de este, cobran protagonismo en un bello crescendo final.
En este su noveno disco, Santtana utiliza francés en la magnífica “La biosphère”, estableciendo, además del discurso central del álbum en torno a la Tierra como organismo vivo (“la biosfera es la nueva era”, canta aquí, como en “O paraíso” anuncia que “el paraíso ya está aquí”), otras conexiones musicales de orfebrería: maridaje de samba, pop y chanson coronado con unos jubilosos coros femeninos. Después sale a la calle, distendido, para interpretar con Flavia Coelho “Muita pose, pouca yoga”, una divertida diatriba sobre las apariencias. Se repliega sobre sí mismo, en intimidad, con una voz a punto de rasgarse en “No interior de tudo”, y ejecuta las sensoriales baladas nocturnas “A transmissao” y “Sobre la memoria”, esta interpretada en castellano: el silencio trae el sonido del tiempo mientras las rocas se impregnan de la Historia. Su temario es amplio y abraza el pop anglosajón con una sentida versión samba-jazz de “The Fool On The Hill” de The Beatles, en diálogo con la cantante francesa Flore Benguigui. ∎