Bueno, y también la perplejidad de unas redes sociales a las que esta unión les parece un poco raruna. Claro, que en esas mismas redes no han podido evitar empezar a bromear con la sospecha de que una acertadísima predicción para el 2026 va a ser que Katy Perry escriba una canción sexualmente explícita sobre Justin Trudeau. Y que, obviamente, y atendiendo a las altísimas cotas de sofisticación de la retórica y la poética habitual en las letras de la artista, este futuro temazo fijo que se titula “Oooooooh, Canada”. Para qué más.
También hay quien ha pretendido escandalizarse con que entre la cantante y el político se abra una abismal brecha de edad de ni más ni menos que 13 años. Algo que podría resultar preocupante si ella tuviera 17 y él 30, pero que en este caso queda un poco ridículo porque Katy tiene 40 años y Justin, 53. Otra conclusión muy diferente se obtiene al comparar el valor patrimonial de ambas figuras públicas para descubrir que la que gana aquí la partida es ella. Para sorpresa de nadie.
Si te paras a pensar, salir con alguien como Katy Perry cuadra perfectamente en el arco narrativo de alguien como Justin Trudeau. Sobre todo si tenemos en cuenta que, hace un buen pilón de décadas, Pierre Trudeau (padrísimo de Justin y también ex primer ministro de Canadá) estuvo saliendo con la mismísima Barbra Streisand. Así que de casta la viene al galgo… Y eso probablemente tenga bastante mustia a la primera dama de Estados Unidos, ya que siempre se ha dicho que resulta curioso comprobar cómo ese robot llamado Melania que sonríe en escasísimas ocasiones suele tener una cara de felicidad extrema cuando le toca besar cortésmente a Trudeau en cualquier acto político que se le ponga por delante.
Hay quien incluso se ha aventurado a crear una fake new que, viendo la deriva política de yankilandia, bien podría hacerse realidad cuando se confirme que Melania Trump declara la guerra a Canadá hasta que Justin Trudeau deje de salir con Katy Perry.
Total, que la diva ahora también astronauta ya ha empezado a dejar caer en sus conciertos señales de su nuevo estado sentimental. Y, mientras tanto, yo no puedo hacer otra cosa que fantasear con la mencionada futura canción de Katy en la que esta describa cómo sobrevuela mundos de sci-fi sobre el cohete de Justin para así saber de qué pie calza este señor. Sí, soy así de básico. Pero, si has llegado hasta este punto del texto, probablemente tú también lo seas. Así que pongamos la tetera en el fuego, porque vamos a gozar de té sabroso durante una buena temporada.
¿Pensabas que “Operación Triunfo” no volvería a aparecer por esta sección después del Haciendo Scroll en el que hablé de su gala inaugural? No te lo voy a negar: yo también lo pensaba. Pero los caminos del Señor son inescrutables, y resulta que el programa del pasado lunes 13 de octubre contó con la actuación de Valeria Castro y Dani Fernández, lo que probablemente pusiera a muchos en modo Paquita Salas.
Inexplicablemente, Valeria sonó tal que así. Por decirlo de forma suave, la autora del celebrado “el cuerpo después de todo” (2025) sonó como “yo intentando hablar después de haber subido las 3000 escaleras que hay para llegar a mi clase”, lo que hizo que muchos declararan que, según lo visto en la gala, la expulsada tendría que ser Valeria Castro. Para no volver. Aunque, claro, nadie mejor que una vieja conocida para comunicar esta decisión del jurado. Porque está claro que, de seguir Buika en el programa, no habría dudado ni un segundo en nominarla sin alterar ni un músculo de su cara de esfinge.
Es difícil explicar y, sobre todo, defender esta actuación. Así que no resulta para nada extraño que ya empiecen a circular constataciones como la que sigue: “Eres más malo que el directo de Valeria Castro como nueva frase de cabecera”. Claro que también hay quien ha salido en defensa de la artista para aclarar, por ejemplo, que “Yo he ido a un concierto de Valeria Castro y no suena así para nada qué cojones le ha pasado”. Una apreciación que otros refrendan: “He visto 2 veces a Valeria Castro en teatro y en ambas he llorado con lo bien que canta, lo perfecto que suena su directo y lo bonito que lo hace. Así que no entiendo como ha salido lo que ha salido en ese dúo con Dani Fernández”.
También hay quien ha preferido andar por la senda del choteo y exponer su momento de lucidez al darse cuenta de que “quien hace los vídeos de canciones famosas con voz del Pato Donald es... Valeria Castro!”. A otros les “parece una broma de mal gusto hacerle comerse un polvorón a Valeria Castro justo antes de salir a cantar”. Hay quien se ha tragado otros vídeos de la artista en directo para certificar que “canta como si tuviera un zapatito de la pollypocket metido en la nariz todo el rato”. E incluso hay quien se pregunta si la que estaba sobre el escenario no era Castro, sino una vieja conocida.
Juro y perjuro que mi intención era cerrar el Haciendo Scroll de hoy con la amenaza antifa que, según Trump, está prendiendo fuego a Portland y que tiene una pinta tan terrorífica como esta, esta o esta otra. Y que cuenta con terroristas tan temidos como estos y héroes bíblicos tan necesarios como estos otros. Esa era mi intención… pero Amaia Montero se cruzó en mi camino para volver a La Oreja de Van Gogh. Y las redes ardieron.
Si esta telenovela te suena de algo es porque ya se hablaba de ella hace ahora exactamente un año, cuando Leire abandonó la banda y corrían rumores de que el regreso de Montero era inminente. Al final no ha sido tan inminente, porque ya tú sabes: las cosas de palacio van despacio. Y por “palacio” aquí entendemos cualquier lugar poblado por intrigas y puñaladas traperas como las de “Juego de tronos”, claro. Sea como sea, dos noticias se han sucedido finalmente para poner las cosas en su sitio: Pablo Benegas abandonaba la formación y, horas después, Amaia Montero se reincorporaba a la misma.
Acto seguido, los tipos se venían arribísima colgando este vídeo en redes en el que incluso ofrecían un sneak peek de cómo sonará este regreso. Lo que no ha impedido que haya quien haya empezado a hacer leña del árbol caído al apuntar que, si siguen desertando miembros de la banda, Amaia Montero acabará regresando “a la nueva Oreja de Van Gogh formada por: Amaia Montero”. Más sola que la una. Porque la gente no parece estar tomándose demasiado bien este movimiento y lo dicen bien clarito: “Se llaman La Oreja de Van Gogh porque El Puñal de Judas era demasiado explícito 🙄🙄”.
Aunque, en verdad, las opiniones están bastante divididas. “Los hay que tienen poca vergüenza y los que hacen las cosas mal, luego están los de la Oreja de Van Gogh que son ambas”, dicen unos. “Las personas susceptibles de ir a la gira de La Oreja de Van Gogh nos dividimos generacionalmente entre los que leemos el nombre de Pablo Benegas y automáticamente pensamos ‘el hijo de Txiki Benegas’ y los que no saben quién fue Txiki Benegas”, afirma Paloma Rando. Pero, mientras a muchos todo esto les huele a rancio , yo solo estoy deseando que esta sea la portada del retorno de la formación. ∎