Flock Of Dimes

Como avance de su próximo álbum, “The Life You Save”, cuya publicación está prevista para el 10 de octubre, Flock Of Dimes ha lanzado el sencillo “Long After Midnight”, una caricia de folk-pop acústico que, en cierto modo, despoja a la cantante, guitarrista y compositora de Baltimore de la carcasa sutilmente electrónica que envasaba sus dos discos anteriores, “If You See Me, Say Yes” (2016) y “Head Of Roses” (2021).

Ubiquémosla: Flock Of Dimes es el alias que emplea Jenn Wasner cuando graba en solitario. Su sólida reputación, sin embargo, data de finales de los dos mil, y le llegó no por Flock Of Dimes, sino por su papel como mitad del dúo Wye Oak (junto a Andy Stack) y por algunas de sus jugosas colaboraciones por separado, entre las que su rol de guitarrista de gira con Bon Iver ocupa lugar preferente. Pero uno sospecha que es en la música de Flock Of Dimes donde Wasner, sin la obligación de comprometerse laboralmente con otros artistas, es más ella misma que en ningún otro proyecto.

“Long After Midnight” lo apuesta todo a la melodía. De estructura pintoresca, el tema carece de estribillo: una estrofa de quebradizas notas, las cuales remiten al folk de los años setenta, ejerce, hasta tres veces, de suficiente cimiento para sostener una bella melodía tan delicada como plúmbea. Pero no menos maciza que la tonada de “Long After Midnight” es la voz de la propia Wasner: arropada al principio solo por guitarra acústica –un impredecible puente con batería y pedal steel guitar rompe la posible monotonía–, se desliza con suave destreza por registros dignos de Joni Mitchell, creando una cálida atmósfera que lo mismo invita a tomarse un vino frente a la chimenea que a sonar de fondo en una serie juvenil ambientada en un college del Medio Oeste.

Acorde con los cánones de la música tradicional estadounidense, la letra de “Long After Midnight” cuenta una historia (ella le presta dinero a un amigo a sabiendas de que no lo devolverá, lo que la conduce a reflexiones más profundas sobre la vida) que evoca amistad, ternura y compromiso. Una serie de atractivos que, en conjunto, hablan de una Wasner en uno de sus mejores momentos como compositora y colocan este sencillo entre los más inspirados de su ya larga trayectoria. ∎