El pasado viernes 15 de agosto, la página oficial de Greg Kihn (1949-2024) publicó un comunicado firmado por su representante que anunciaba el fallecimiento del artista. Kihn –que murió el 13 de agosto en la zona de la Bahía de San Francisco, en la que residía– tenía 75 años y padecía alzhéimer.
Como muchos otros boomers norteamericanos, Kihn escuchó la llamada del rock’n’roll durante la adolescencia, cuando The Beatles irrumpieron en la televisión de todo el país. Sus primeros pasos los dio en la escena local de Baltimore, la ciudad donde nació y creció, pero a mediados de los setenta se mudó a San Francisco y llamó la atención del incipiente sello californiano Beserkley, que incluyó dos de sus canciones en el recopilatorio “Beserkley Chartbusters Volume 1” (1975), en el que también participaron Jonathan Richman, The Rubinoos y Earth Quake.
Pocos meses después estrenó discografía propia con el álbum “Greg Kihn” (1976), grabado por la primera encarnación de Greg Kihn Band, que, bajo su liderazgo, lograría colocar algunas canciones en las listas estadounidenses durante la primera mitad de la década siguiente. Antes, publicó “With The Naked Eye” (1979), álbum que incluía “Rendezvous”, una composición que Bruce Springsteen había descartado para su “Darkness On The Edge Of Town” (1978), además de su particular visión de “Roadrunner”, el hito primigenio de los Modern Lovers de Jonathan Richman.