Disco destacado

Lana Del Rey

Did you know that there’s a tunnel under Ocean BlvdPolydor-Interscope-Universal, 2023
La América soñada por Lana Del Rey alcanza su cumbre, por ahora, con “Did you know that there’s a tunnel under Ocean Blvd”, su álbum más introspectivo y nostálgico. Un viaje en blanco y negro por los deseos y los desastres de una autora e intérprete cada vez más firme y segura en la defensa de sus postulados a través del pop. Mejor álbum de 2023 en las listas de Rockdelux. Carolina Velasco escribió la crítica.

Pese a haber firmado canciones que encapsulan el zeitgeist de la última década y de tener un puñado de discos que ya son clásicos, Lana Del Rey nunca ha dejado de ser “the girl you love to hate” en una industria que no se toma demasiado en serio a las mujeres que se dedican al pop (por más que la propia artista alegase que su alejamiento de las redes sociales fuera para centrarse en su música, cuesta no ver el acoso continuo como verdadera razón). Escuchando este último trabajo, cabe preguntarse hasta qué punto ese odio, que siempre se filtra en sus letras de una u otra forma (“before you talk let me stop what you say / I know, I know, I know that you hate me”, canta en “Taco Truck x VB”), ha sido también el acicate que ha permitido a Lana hacer en este disco lo que le da la gana, dejando de lado las expectativas que puedan tener fans e industria, porque si algo queda claro tras escuchar este álbum es que Lana ya va por libre.

Lana dejó el listón alto con “Norman Fucking Rockwell!” (2019), y ni “Blue Banisters” (2021) ni “Chemtrails Over The Country Club” (2021) tuvieron el mismo impacto. Con su último trabajo es fácil ver que la artista estaba dejando la artillería pesada para “Did you know that there’s a tunnel under Ocean Blvd”, aunque quien vaya buscando el hit obvio no lo va a encontrar: aquí no estamos ante una simple colección de canciones con un par de singles comerciales, sino ante un disco poco acomodaticio que evoca un estado anímico y en el que Lana da rienda suelta a la experimentación. Es además un trabajo ambicioso, de casi hora y media de duración, y en el que colaboradores y productores, lejos de aparecer en letra pequeña en los créditos, están en la misma portada del disco (del ubicuo Jack Antonoff a Father John Misty pasando por Tommy Genesis, en una ecléctica lista de invitados).

Yendo por libre. Foto: Chuck Grant
Yendo por libre. Foto: Chuck Grant

“Did you know that there’s a tunnel Under Ocean Blvd” es un álbum tremendamente introspectivo en el que Lana explora temas como su propia familia (“The Grants”), el odio (“Taco Truck x VB”, donde de paso revisa “Venice Bitch”), la sexualidad (“Peppers”, con Tommy Genesis), la nostalgia (“Fishtail”) o el amor (“Margaret”, con el propio Jack Antonoff bajo el seudónimo de Bleachers y a cuya mujer hace referencia la letra). Tampoco faltan unos interludios a cargo de Jon Batiste o del reverendo Judah Smith, que suelta un sermón sobre la lujuria que no ha sido muy bien recibido por parte de algunos fans, pero que casa con un disco que funciona como una mirilla a las inquietudes de Elizabeth Grant.

La complejidad de este álbum tampoco se puede pasar por alto: no solo llama la atención el protagonismo del piano y su carácter melancólico, sino también el escaso o nulo interés de Lana Del Rey por realizar un disco complaciente, con canciones que son casi a capella (“Kintsugi”), guiños al country (“Let The Light In”, junto a Father John Misty), al góspel y al trap de “Fishtail” o “Peppers”.

Si la primera parte del álbum es más canónica, con piano y arreglos orquestales, a partir de la segunda mitad el disco sigue un camino mucho más impredecible, en el que la artista se permite el lujo de entregar canciones frágiles que parecen oraciones (“Fingertips”) o composiciones basadas en samples, como el de SYML para “Paris, Texas”. Pero las tres mejores canciones llegan justo al final: “Fishtail”, la muy sexual “Peppers” y “Taco Truck x VB”, que aúnan las melodías habituales de Lana con esa sensación de indolencia que transmiten sus primeros trabajos.

“Did you know that there’s a tunnel Under Ocean Blvd” no es un disco accesible: es sobrio, requiere una escucha atenta y sacrifica los himnos pop y los estribillos en aras de la libertad artística y la búsqueda de una autenticidad alejada de histrionismos. Quien espere a la “vieja” Lana es posible que se sienta decepcionado, pero este álbum está llamado a crecer con el paso del tiempo, y no sería de extrañar que marcase un punto de inflexión en la carrera de una creadora en la que parece empezar a pesar más su faceta de compositora que de intérprete. ∎

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