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Año Megan: la mayor irrupción musical de 2020 en 10 claves

Lo que parecía un año de transición en el rap mainstream, sin discos de Drake, Kendrick Lamar, Cardi B o Travis Scott, nos tenía reservada la explosión definitiva de Megan Thee Stallion, un fenómeno de los que rebasan los nichos, los targets… y la lógica. En 2020 se ha frenado casi todo, pero no la carrera de este nuevo icono generacional: en los últimos doce meses ha acumulado hitos suficientes para varias vidas.

En el año en el que se ha detenido el tiempo, Megan Thee Stallion ha sido una centella: lo ha hecho todo mientras ahí fuera no pasaba nada. Es imposible saber qué hubiera ocurrido en su carrera si 2020 no hubiera sido 2020, pero parece difícil imaginar un timeline con más titulares que el que ha protagonizado durante los últimos doce meses pese a ser una artista que, recordemos, no publicó su primer álbum oficial hasta el mes pasado. De hecho, no hace tanto que se asomó por primera vez al Billboard Hot 100 (en abril de 2019 con “Big Ole Freak”), pero de un tiempo a esta parte todo a su alrededor ha cambiado a la misma velocidad que rapea.

En realidad, lo único que no ha cambiado en su universo es precisamente eso: que rapea. Al contrario que otras figuras rap que han completado el crossover pop en los últimos años experimentando con su faceta más melódica, caso de Drake o Nicki Minaj, ella no ha hecho apenas concesiones, como si no quisiera romper con lo que aprendió en casa. Megan Jovon Ruth Pete, nacida en Texas hace 25 años, tuvo muy cerca ese referente que otras ven en ella ahora. Su madre, Holly Thomas, desarrolló una carrera de cierta popularidad en la escena hip hop de Houston con el alias Holly-Wood. Fue su puerta de entrada a los artistas que la han influido (Three 6 Mafia, Notorious B.I.G., Pimp C) y su mánager hasta que falleció de un tumor cerebral en marzo de 2019, el mismo mes en el que también murió su abuela.

Verla despegar imparable después de ese doble guantazo vital ha sido inspirador, como casi todo lo que ha hecho durante 2020. Dentro y fuera del estudio, en las galas y en las redes, la texana ha sido un ejemplo de posición de privilegio bien utilizada, un modelo de conducta; también para las nuevas generaciones aunque sea una alerta de explicit content con patas. Megan Thee Stallion le tiene alergia al eufemismo, dice más tacos que palabras, sabe más sinónimos de “follar” de los que nunca habíamos imaginado, pero durante este año no ha dejado de recordarnos que hay cosas bastante más graves que eso mientras completaba un equilibrio imposible: ¿cómo ha conseguido, al mismo tiempo, dar la sensación de seguir un plan de dominación mundial perfecto y perfumar cada movimiento con una espontaneidad que simplemente se tiene o no se tiene?

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#01 Coachella 2020: lo que podía haber sido y no fue

Pocos índices más fiables que el cartel de Coachella para determinar tu posición dentro de la pirámide del negocio de la música: dime con qué tamaño de fuente aparece tu nombre y te diré quién eres. No había que afinar mucho la vista para localizar a Megan cuando el pasado mes de enero se lanzó el cartel para la edición de 2020 del festival californiano, aunque su estreno allí, ya convertida en una headliner al uso, tendrá que esperar. Como muestra de lo que podía haber sido y no fue quedan tres actuaciones: un espectacular show a lo “Mad Max” en los BET Awards a finales de junio, el concierto virtual coreografiado por Jaquel Knight (coreógrafo de las históricas actuaciones de Beyoncé en Coachella 2018) que ofreció un par de meses después, su actuación en la gala de los American Music Awards o la performance con la que llenó ella sola un estadio vacío para el programa de James Corden.

“I could build a house with all the brick I got”.

#02 Moldeando el futuro (ahora)

Aunque apostar por Megan Thee Stallion a principios de este año era hacer una inversión de mínimo riesgo, hay que apuntarle a ‘Rolling Stone’ el tanto de haberla incluido junto a SZA y Normani en la portada del especial Women Shaping The Future que publicó en marzo. Lo que quizá no vieron venir en ‘Rolling Stone’ es que el futuro ya se les había echado encima: para entonces ya había pasado por el plató de Jimmy Fallon, acumulaba varios millones de plays con sus colaboraciones con Gucci Mane, DaBaby o Nicki Minaj y la revista ‘Time’ la había incluido a finales de 2019 en su lista Time 100 Next (junto a otras popstars como Billie Eilish, Bad Bunny o Blackpink) como una de las personalidades emergentes destinadas a liderar el futuro de los negocios, el deporte, la música o la política.

#03 “Suga” a pesar de todo: Megan siempre gana

Medio año antes de que, en el clímax del breakdown que retransmitió por Twitter, Kanye West se meara encima de sus Grammy como protesta contra las grandes discográficas, Megan Thee Stallion tuvo su particular combate contra su sello, 1501 Certified Entertainment. Por supuesto, lo ganó (más o menos). Tras reclamar a principios de marzo que 1501 le impedía lanzar nueva música, presentó una demanda (con la ayuda del abogado que asesoró a la familia de Marvin Gaye en la acusación de plagio a Robin Thicke y Pharrell Williams) alegando fraude, incumplimiento de contrato, tergiversación negligente y unas cuantas cosas más relacionadas con el acuerdo al que habían llegado cuando ella era “joven e ingenua”. Un juez de Texas decretó una orden de restricción temporal contra la disquera y esa ventana de oportunidad la aprovechó la rapera para publicar “Suga”, un EP que ha terminado siendo bastante menos anecdótico de lo que cabría pensar. “Todavía estoy trabajando en mi álbum, pero he tenido que darme prisa y sacar un EP”, explicó sobre un lanzamiento que llegaba el 6 de marzo.

#04 “Savage”, de TikTok a Beyoncé

“I'm a savage: classy, bougie, ratchet; sassy, moody, nasty”. El mejor perfil de persona y personaje que se ha compartido en los últimos meses sobre Megan lo soltó ella misma, orgullosa, en uno de los estribillos del año. “Savage” ni siquiera fue el single principal de “Suga” y tampoco contó con vídeo oficial, pero una coreografía viral que invadió TikTok en plena cuarentena hasta convertirla en la canción más reproducida en esta red social en el mes de marzo le valió la promoción soñada. Un mes después, el 29 de abril, llegaría un remix con Beyoncé de invitada con doble premio: suponía su primera colaboración con uno de los referentes de su infancia y su primer número uno en el Billboard Hot 100. En enero podría llevarle también a su primer Grammy, ya que opta a grabación del año, performance rap del año y canción rap del año.

#05 La cruz: el caso Tory Lanez

“El domingo por la mañana sufrí heridas de bala como resultado de un crimen que se cometió contra mí”. Así anunciaba, en un perfil de Instagram que ahora se acerca a los veinte millones de followers, el suceso en el que se vio envuelta el pasado 12 de julio cuando volvía de una fiesta junto al cantante Tory Lanez y otra persona. Megan acababa en el hospital, donde pasaría por el quirófano para retirarle las balas, y él era detenido por posesión de arma de fuego. Casi un mes y medio después, la rapera acusaba a Lanez a través de sus redes sociales: “Me disparaste e hiciste que tu representante y tu equipo fueran a blogs a mentir y toda esa mierda. Deja de mentir, ¿por qué mientes?”. El canadiense respondía a las acusaciones dedicándole un disco entero (“DAYSTAR”) y no pocas voces ponían en duda su rápida recuperación, pero otras artistas como Kehlani o JoJo apoyaban públicamente a Megan eliminando los versos que aportaba Lanez en sus últimos trabajos.

Cardi B & Megan Thee Stallion: now from the top.

#06 “WAP”: colaboración histórica con Cardi B

Que la texana ha hecho historia en este 2020 no es una frase hecha. Tuvieron que llegar Cardi B y ella en mitad del verano pandémico para que pasara algo que hasta ese momento no había pasado jamás: que una colaboración entre dos raperas llegara a lo más alto del Billboard Hot 100, la lista de singles más importante de Estados Unidos y, por lo tanto, del mundo. “WAP” supuso, además, la décima colaboración entre dos o más mujeres que lo conseguía en la historia y la segunda vez, tras su unión con Beyoncé, que Megan miraba desde arriba a toda la industria en pocos meses. Las cifras y los récords forman parte inevitable del relato de una canción que fue reproducida ¡93 millones! de veces en la semana de su lanzamiento (otro hito), pero el verdadero poder de “WAP” reside en otro tipo de impacto difícil de cuantificar pero mucho más valioso. Es un himno al placer carnal en el que los hombres somos invisibles o, en el mejor de los casos, complementos impersonales de usar y tirar: “en la cadena alimenticia, yo soy la que te come”.

#07 Un icono más allá de lo musical

Aunque no es obligatorio que una artista se involucre activamente en su contexto sociopolítico, para Megan no parece haber otra manera de estar en el juego. Utiliza su posición en la industria, su condición de referente popular que excede lo musical, para lanzar mensajes con la seguridad de que en su boca se van a escuchar. Por ejemplo, en la citada actuación en los BET Awards colocó el símbolo del movimiento Black Lives Matter en el escenario; a su paso por “Saturday Night Live”, a principios de octubre, actuó con el lema “Protect Black Women” coronando el escenario y en su performance incluyó fragmentos de discursos de Malcolm X y la activista Tamika Mallory. Además, destinó los beneficios de su millonaria colaboración con Beyoncé a una asociación sin ánimo de lucro de Houston y, a propósito del estreno del single “Don’t Stop”, lanzó la campaña Don’t Stop Scholarship Fund, creada para correr con parte de los gastos derivados de la carrera estudiantil de jóvenes afroamericanas. No extraña que, a finales de septiembre, la propia revista ‘Time’ la incluyera en su célebre lista de las 100 personas más influyentes de 2020 como “epítome de la tenacidad”. Incluso utilizaba su imagen como uno de los reclamos principales de la publicación por encima de Angela Davis, J Balvin, Lewis Hamilton o Joe Biden.

#08 BET Hip Hop Awards: reinando entre testosterona

Circula por YouTube el que parece ser el freestyle más antiguo de Megan Thee Stallion que puede encontrarse en la red, grabado en 2016. Es un vídeo en una azotea en la que se han reunido algunas de las mayores promesas rap del momento en Houston: ella, que por aquel entonces solo llevaba unos meses rapeando de manera más o menos profesional, es una de las dos únicas mujeres entre la docena de MCs que se van alternando ante la cámara. Son veinte minutos de documento, pero pueden resumirse en los 90 segundos en los que Megan rima con un magnetismo que casi puede tocarse. Cuatro años después, el pasado mes de octubre, volvió a reinar entre testosterona en la gala de los BET Hip Hop Awards. Ni Travis Scott, ni Roddy Rich, ni Pop Smoke, ni Future: el premio a artista hip hop del año fue suyo.

#09 Las buenas nuevas de Megan

Si no fuera porque Bad Bunny siempre ha tenido la última palabra en este 2020, “Good News” (1501 Certified, 2020) hubiera sido el último disco verdaderamente significativo del año. Su primer álbum oficialmente acreditado tras mixtapes varias, alguna tan relevante como “Fever” (2019), llegaba el 20 de noviembre, apenas una semana después de ser anunciado. Megan obviaba así cualquier campaña de promoción tradicional porque, en realidad, ya no le hacía falta a esas alturas: “Good News”, con sus colaboraciones con DaBaby, Young Thung o SZA y su ajuste de cuentas con Tory Lanez en el corte inicial, llegaba hasta el segundo puesto del Billboard 200 (solo por detrás del último trabajo de los surcoreanos BTS) propulsado por el 2020 casi insuperable de su autora.

Imparable: Megan & Young Thug en el País de las Maravillas.

#10 Pasando de las listas… y coronándolas

Dictan las viejas normas de la industria musical que lanzar un álbum en las últimas seis semanas del año es algo parecido a un suicidio porque puede llegar cuando las listas de lo mejor del curso musical ya están cerradas. Ahí, entre discos de villancicos y ediciones especiales, hay una especie de limbo, un vacío legal, pero la intención de Megan no ha parecido tanto lanzar su primer álbum como rematar su 2020 con un chimpún. Casi sin querer, “Good News” ha tenido tiempo de colarse en más de una lista (‘Pitchfork’, ‘Rolling Stone’, ‘Complex’) pese a ser un trabajo irregular y hasta cierto punto accesorio, pero sobre todo hay que buscarla en lo más alto de los tops de canciones: “WAP” y la versión de “Savage” junto a Beyoncé, un par de himnos transversales que han calado a diferentes niveles, son dos de las indiscutibles canciones del año que ha visto irrumpir definitivamente a Megan Thee Stallion. ∎

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