Aún no se ha sabido la cifra de personas que han quedado ciegas por empeñarse en ver el eclipse solar que el pasado lunes pudo contemplarse en México, Estados Unidos y Canadá –parece ser que desde Galicia y Canarias, estirando el cuello, además de quemarte la retina adquirías tortícolis crónica–, pero hubo gente que ha sufrido daños peores, pues, según leo en alguna parte, en Arkansas cientos de parejas, sin duda enajenadas por el fenómeno, decidieron arruinar sus vidas casándose. Pues bien, el prodigio astronómico también tuvo efecto en la música; positivo o negativo, tú lo decides.
Taylor Swift aprovechó la repentina y fugaz nocturnidad para, con premeditación y alevosía, enjaretar en Instagram un trozo de letra de su nuevo disco. Ciertamente, la elección del momento tenía sentido: “La multitud se vuelve loca a su alcance, media luz de luna, eclipse total”, es la traducción al castellano de los versos. La verdad es que ha dado en la diana con lo del eclipse y la locura. En fin, para Swift cualquier excusa es buena para hacer promoción de este próximo álbum, “THE TORTURED POETS DEPARTMENT”, cuya publicación está prevista para el 19 de abril. Es decir, poco antes del inicio del tramo europeo de la gira “The Eras Tour”, que pasará por el Santiago Bernabéu de Madrid los días 29 y 30 de mayo, con Paramore como teloneros.
Luces y sombras ha dejado también la entrevista a Rihanna que el lunes se publicó en ‘Interview’. Luces, porque da gusto verla en la portada como un cruce entre Santa Teresa de Jesús, Susana Estrada y la Madonna hipermaquillada de “Celebration”. Sombras, porque al hablar de su próximo disco, que sus fans esperan desde hace siete años, ha dado largas: “Tengo muchas ideas visuales. Es raro. Mi cerebro está trabajando al revés en este momento. Normalmente tengo la música primero, y la música me lleva a todas esas oportunidades visuales, y ahora tengo todas estas imágenes y aún no tengo las canciones para ellas, pero tal vez esa sea la clave... Quizá las ideas visuales me estén llevando a las canciones que necesito hacer. Ideas aleatorias, ideas extravagantes, cosas que no tienen nada que ver conmigo. No puedo decir más. La competencia está mirando”.
Si hay un grupo cósmico son The Beatles. Hay por ahí un nuevo libro sobre los Fab Four escrito por Peter Brown y Steve Gaines –“All You Need Is Love. The Beatles In Their Own Words”, aún sin publicar, saldrá el viernes– que está dando que hablar, pues contiene perlas de las que hacen salivar a los nostálgicos. Primero trascendió que afirmaba que Yoko Ono había empujado a John Lennon a consumir heroína, y ahora, que George Harrison se animó a tocar la guitarra después de ver un concierto de Cliff Richard y pensar: “Eso lo hago yo mejor”. Increíblemente no hay semana sin noticia de The Beatles o alguno de sus componentes vivos, y la más reciente es que Ringo Starr presentará este viernes nuevo single, “February Sky”, avance de su EP “Crooked Boy”, disponible el 31 de mayo. Además, el 17 de abril Libros Cúpula va a poner en circulación “George Harrison. Beatle a su pesar”, biografía del guitarrista escrita por un especialista en el formato como Philip Norman.
El planeta entero está pendiente del nuevo disco de Billie Eilish; también nuestro bendito país: me comentan que en el Congreso de los Diputados no se habla de otra cosa. El lunes, poco después de abrir boca con un acuático vídeo corto acompañado de la pregunta “Ready?” en Instagram, anunció que su tercer trabajo se titulará “HIT ME HARD AND SOFT” y se estrenará el 17 de mayo. Rebelándose contra la tendencia actual, no lanzará ningún single antes de esa fecha. Eso sí, el álbum se editará en biovinilo, que es un material reciclado en cuya fabricación no se emplean aceites fósiles ni genera gases residuales industriales. Así que, si te interesa, ve ahorrando.
Mientras tanto, en el Reino Unido están muy pendientes de la suerte que corre el último álbum de The Libertines, “All Quiet On The Eastern Esplanade”, publicado la semana pasada. Allí, como cualquier conato de eclipse pasa inadvertido por la gruesa capa de nubes, entre pinta y pinta se entretienen haciendo cábalas sobre las ventas de los discos hechos por ingleses que entre pinta y pinta se entretienen grabando discos. Los ínclitos Pete Doherty y Carl Barât pertenecen a la más alta jerarquía de esta casta, y según algunos cálculos, su reciente álbum podría situarse en el número uno de la lista de ventas; todo un hito, si pensamos que la última vez que lo consiguieron fue hace veinte años con “The Libertines” (2004), su segundo trabajo.