En enero del año pasado, el músico inglés
Vegyn publicó un disco con setenta y cinco canciones. Bueno,
“Don’t Follow Me Because I’m Lost Too!!” (2022), que así se titulaba, era más bien un recopilatorio de ideas, sonidos y bocetos grabados entre 2015 y 2021. La esencia de este trabajo era mostrar de forma abierta su proceso creativo, los pasos en falso, las correcciones, los experimentos y sus dudas. Después de haber producido a Frank Ocean y Travis Scott su estatus en ciertos lugares de la industria estaba más que asentado. Y, sin embargo, Vegyn quiso desnudarse y, de alguna manera, empezar de cero. De hecho, el propio Vegyn, nacido en Londres en 1993, definió este lanzamiento como
“catártico”. En las dos horas y media que dura el artefacto, encuentras hip hop, baladas de pianos clásicos o lo-fi adolescente, IDM sutil y temas ultrapisteros por encima de los 160 BPM. Como si Blood Orange y Toro Y Moi hubieran pasado un fin de semana trasteando con ordenadores y cacharros. Como un encuentro casual entre Aphex Twin y James Blake. Tras un año dedicado a la producción de otros (George Riley, Double Virgo) y sin mostrar material nuevo, Vegyn arrancó ayer en Ámsterdam una gira por Europa y Estados Unidos que anunció apenas días antes en su Instagram con el
caption: “A new chapter begins…” (“Un nuevo capítulo arranca…”). Esta noche actúa en Bruselas. Quién fuera eurodiputade.